Ensayo “El Extranjero” –Albert Camus

Ensayo “El Extranjero” –Albert Camus

Andrew Guamán

Primero “D”

La novela nos presenta una forma indiferente de pensar,  más bien diremos carente de sentido, la ausencia absoluta de sentido a la vida. Nos muestra a Meursault un hombre frío, apático, ya que llega a perder el sentido por su propia identidad. Su vida se basa en una rutina, perdiendo esta misma, lógica alguna. Desarrollaremos la idea de “hombre absurdo” presentada en la novela, trataremos de dar lógica alguna al personaje y al por qué Albert Camus nos muestra este prototipo de hombre basándonos en el contexto de producción. 

Albert Camus nos presenta la carencia de valores que poseía el mundo contemporáneo como consecuencia de la frustración y la desesperanza en la que Europa quedo sumergida, durante y después de la guerra. En esta época surge una especie de nacionalismo que influyó en las pautas de la Literatura, al punto tal que no se les dejaba a los escritores expresarse de forma libre en sus obras, por lo que buscaban maneras discretas de manifestarse. Es ahí cuando Camus nos presenta al protagonista de su novela, Meursault, quien no tenía sentido ni una meta definida para su vida, vivía por vivir. A esto podemos interpretarlo como un “desencanto por la vida”, pensamiento presente en la época. En consecuencia esto lleva al protagonista a una vida fría, a una actitud indiferente, y a uno que otro acto insensible.

Desarrollamos en esta novela la idea de “hombre absurdo”, quien es aquel que se muestra completamente consiente de la inutilidad de su vida, rasgo que hoy está casi extinto. 

“Quizá no estaba seguro de lo que me interesaba realmente, pero en todo caso, estaba completamente seguro de lo que no me interesaba” Meursault era un hombre que no encajaba en la sociedad, lo que lo ha convertido en “el extranjero” dentro de su propio entorno, no parece importarle lo que suceda a su alrededor, según él nada de lo que pase cambiara su vida, todo seguirá siendo lo mismo, carencia de sentido por la vida, por lo mismo él la vivía por el hecho de “tener que vivirla”, lo que demuestra su falta de ambición, de proyecto de vida. 

La ausencia de valores influye bastante en su actitud y forma de ser, se siente indiferente a todo, incluso al amor, tanto al de pareja como al maternal. “Todos los seres normales habían deseado más o menos la muerte de aquellos a quienes aman”. “¡Que me importaban la muerte de los otros, el amor de una madre!”. A él no ha de importarle pero a los demás sí, y aunque no se haya dado cuenta, tal vez solo le parece insignificante, siempre hubo gente detrás de sus actos, siempre va a existir quien asuma las consecuencias.

“Comprendí que había destruido el equilibrio del día, el silencio excepcional de un playa en la que había sido feliz. Entonces, tiré aún cuatro veces sobre un cuerpo inerte en el que las balas se hundían sin que se notara. Y era como cuatro breves golpes que daba en la puerta de la desgracia”, comete un absurdo crimen y, a pesar de sentirse inocente, jamás mostrará sentimiento alguno de injusticia, arrepentimiento o lástima, “se me había hecho saber, solamente qué era culpable. Era culpable, pagaba, no se me podía pedir más” Siempre se puede pedir más. “Anunciaban partidas hacia un mundo que ahora me era para siempre indiferente” y nos preguntamos ¿Cuándo no lo fue?
¿Lógica? No nos pidamos algo inexistente, en un mundo que al parecer es paralelo al nuestro, “Al encontrarlo tan semejante a mí, tan fraternal, en fin, comprendía que había sido feliz y que lo era todavía. Para que todo sea consumado, para que me sienta menos solo, me quedaba esperar que el día de mi ejecución haya muchos espectadores y que me reciban con gritos de odio”, al parecer Meursault encontró solo su lógica.

...