UN CORAZÓN ROTO

LITERATURA

UN CORAZÓN ROTO

Prologo

Él llevaba tiempo observándola con mucha atención. Le gustaba todo de ella. Hasta amaba la forma en la que bailaba un sábado por la noche en su cuarto con el cabello alborotado por el aire. Son embargo, había algo que no le gustaba de ella y era su nombre, solo por el simple hecho de que lo desconocía. Pero todo cambio una noche en la mañana, cuando el decidió preguntarle su nombre.

Capítulo I

Era realmente hermosa, no podía dejar de verla todos los días. Para otros era una chica común, pero ante mis ojos era como ver lo más hermoso del mundo, era una obra de arte, no todo el mundo podía entenderlo, pero el que lo hacía, no la olvidaría jamás.

Su cabello natural, sonrisa perfecta y con un cuerpo que todo hombre desearía.

Me encantaba la manera de con el simple hecho de verla, sacarme una sonrisa, alegrarme el día por completo y siempre mantenerme con una buena vibra.

Todavía recuerdo aquel día que la vi por primera vez, estábamos jugando en la pradera cuando de repente ella apareció, al instante supe que era la indicada., la correcta, mi otra mitad.

Sentía una conexión hacia ella muy fuerte, sentía que la conocía hace años, cuando la empecé a tratar, pero solo llevaba unos pocos días. Nunca antes había sentido algo parecido.

*

Yo solo era un chico de 17, un adolescente no tan sociable, con ninguna chica detrás y al que nunca le habían roto el corazón.

Al principio, me deje llevar por su perfección, era una persona tan hermosa que parecía hasta modelo, actriz o que estaba en un sueño, ya que chicas como ella no se veían diario.

No iba a perder esta oportunidad con el posible amor de mi vida, así que cada día hablaba más con ella, la empezaba a conocer y ganarme su confianza.

Durante ese tiempo me di cuenta que no solo era linda por fuera, sino que igual por dentro era un amor.

Obviamente como todo bueno hay algo malo, tenía sus imperfecciones, pero la quería con todas ellas y aun así se me hacía única en este planeta. Era tan intenso todo lo que sentía por ella que ya no podía guardármelo, ella tenía que saberlo. Estaba muy nervioso y tenía miedo de que no sintiera lo mismo que yo, pero mis ganas de estar con esa chica eran impresionantes. Hablamos sobre esto, y dicho y hecho, no fui correspondido.

La chica de mis sueños me había mandado por un tubo diciéndome que solo quería conmigo una amistad.

Directo en la friendzone, zona de amigos, donde todo duele.

*

Éramos ella y yo en mis sueños, no había nadie más, no quería a otra persona. Pero todos esos sentimientos se derrumbaron al escucharla decir que no sentía nada por mi. Era la primera vez que alguien me decía que NO, Fue mi primer corazón roto.

*

No quería creerlo y no acepté esa idea, así que para que viera que enserio quería estar con ella, emperecé a demostrar mi amor.

Me gustaba escribir mis pensamientos en alguna parte, normalmente en mi celular, pero no le iba a mandar mensaje por ninguna red social, iba a ser muy común. Así que le escribí una carta con todos mis sentimientos. Para esto ya había pasado varias semanas de seguir hablando y hablando, me gustaba escucharla decir sus gustos, compartir tiempo con ella, mirar sus ojos fijamente y darme cuenta que eran los mejores del mundo. Cada que la veía en persona me hacía recordar lo increíble que era, me la pasaba bien con ella, el tiempo se pasaba demasiado rápido, que nunca quería despedirme de ella.

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