Un amor eterno

Érase una vez en el pueblo de La Orquídea, en el conjunto Las Caracolas vivía una familia de apellido Robben, conformado solamente por Laura, una niña tierna y hermosa y su papa Antonio, un hombre introvertido y buena gente, que a pesar de los problemas siempre buscaba la solución a ellos. Los Robben trataban de sobrevivir y superar la muerte repentina de Rosa la mama de Laura, la mujer más bella que ha vivido en la tierra, llena de mucho amor.

- Bueno, eso es lo que siempre me dice Lau (sonrisa).

Tiempo después, el señor Antonio le llego una Gran oferta de Trabajo en una hermosa finca como veterinario, ofrecimiento que decidió aprovechar como una manera de superar todo el dolor familiar. Por otra parte, Laura estaba muy contenta por el nuevo empleo de su padre, porque a ella le fascinaban los animales y en una finca es lo que más se encuentra y además ella quería ser la mejor veterinaria, era su sueño.

- Recuerdo que eso ocurrió en el año 2002. ¡Todo paso ese mismo año! Laura solo tenía 10 años, cuando le paso todo.

A las 7 de la mañana partieron de Las Caracolas, para ir a la finca a su nuevo comienzo, se tardaron 3 horas en llegar, pero por fin llegaron, Laura no dejaba de hablar en todo el camino de lo maravilloso que sería vivir en ese nuevo lugar.

– Ella siempre le encanta hablar, a veces creo que se identifica con los lindos loritos (risas tímidas). La verdad es que se ve muy linda cuando lo hace.

Cuando llegaron se dieron cuenta que se llamaba EL RENACER, nombre que les llamo la atención y les encanto. Lau enseguida fue a ver su cuarto, cuando entro vio una puerta muy pequeña que conducía hasta el sótano, a ella le pareció muy extraño porque era muy frío y escalofriante, cada vez que se acercaba sentía una curiosidad por entrar pero a la vez le daba mucho miedo. Lo que no prestó atención y siguió conociendo su habitación. Había una cama grande y muy hermosa, al frente de esta había una horrible pintura de un payazo, a lo que ella al igual que a la puerta decidió ignorar por el momento.

– Recuerdo que ese, era su primer día en la finca, el cual no iba a desaprovechar, así que hice todo lo posible por presentarme, así como solo yo puedo hacerlo (risa juguetona).

Entonces, Laura escucho una melodía ¡Simplemente Hermosa!, ella comenzó a seguir esa harmonía que salía del Sótano. Cuando llego a ese lugar, había un espejo grande y en él había una nota, que decía:

Laura la leyó e inmediatamente se detuvo la música, ella salió del sótano asombrada y con sentimientos encontrados por lo que vivió ahí. Se dirigió a la sala ayudar a su papa con el trasteo hasta que llego la noche, la hora de dormir. Su papa fue al cuarto a darle las buenas noches pero la encontró dormida, así que le dio un beso, apago la luz y también se fue a descansar. Pasaron las horas y cuando el reloj marcaba las 3:33 de la mañana, Laura volvió escuchar la hermosa melodía, lo que la despertó enseguida, ella no sabía porque la música seguía y quien la tocaba, así que la ignoro y siguió durmiendo hasta que otra vez se levantó por que la música sonaba más fuerte, pero al levantar la cabeza lo primero que vio fue al horrible payazo así que se asustó y empezó a gritar duro, el papa escucho los gritos y fue a ver qué pasaba, ella le dijo que le asustaba la pintura, así que el papa se le ocurrió una idea, colocar una sábana sobre la pintura, lo que a Laura tranquilizo un poco y se fueron a dormir, pero luego a las 4:44 otra vez se escuchaba esa melodía, así que ella decidida fue a investigar, entro al sótano, leyó la nota de nuevo, se detuvo la música y se cerró la puerta, Laura se comenzó a asustar, cuando de repente vio en el espejo un hermoso niño de ojos azules, pelo amarillo y ropa fina.

- El niño más hermoso que sus ojos han podido ver, era un niño con los ojos más azules y bellos como el mar y cabello amarillo como el sol. ¡Bueno, eso lo dijo Lau, no crean que yo soy creído! (risa presumida)

Laura salió corriendo del sótano, y se durmió en seguida, pero en sus sueños, solo veía ese niño que le causó gran impresión, al despertar no dejaba de pensar en aquel niño, en lo lindo que era y en su mirada tan hermosa y a la vez misteriosa, ella no se podía sacar de la cabeza a él, ni tampoco comprendía por que comenzó a sentir amor por la imagen que vio en el espejo, porque ni sabía que era ni quien era, solo sabía que se había enamorado de esos ojos azules.

Pasaron los días, para ser exacto 3 días, Laura quería volver a ver aquel niño lindo, así que fue al sótano y comenzó a leer, entonces otra vez se cerró la puerta, y en el espejo apareció el niño.

- Recuerdo que ese día lau comenzó a preguntar cosas, como: ¿De dónde eres?, ¿Qué eres?, ¿Qué haces en esta finca?, ¿Y tus padres?, ¿Cuántos años tienes?, ¿Cómo te llamas?, ¿Por qué sales de un espejo?... y bueno… muchas cosas más. Solo sé, que No paraba de hablar y era tan linda.

El solo le respondió Dos: Soy de Cuba y me llamo Félix. Se quedaron hablando un rato, jugando y riendo. Pero el señor Antonio entro al cuarto, escucho las risas en el sótano, abrió la puerta y vio a Laura según él sola, la cogió y se la llevo de esa finca.

El papa de Laura, la llevo a un Hospital Psiquiátrico porque creía que estaba loca, ella no podía creer que su propio papa la hubiese metido en un hospital de enfermos psiquiátricos, que no escuchara todo lo que le decía que era solo un mal entendido y que ella tenía un Don. Ella al principio tenía la ilusión de que el papa reflexionara y por el amor que le tenía la sacara, pero pasaban los meses, los años y nunca fue a visitarla. Ella no lo podía soportar así que se llenó de mucho rencor en contra de su papa, estaba muy decepcionada de él y no creía en ninguna persona, ella solo tenía la esperanza de salir y volver a ver a esos ojos azules que tanto amaba y a ese niño que la enamoro FÉLIX y que nunca olvidaba, ella cada noche lo recordaba y cuando lo hacía se sentía mucho mejor, tanto que se le ocurrió la mejor idea que jamás había tenido.

– Aunque era peligrosa muy peligrosa la idea, le funciono a mi hermosa Laura, por fin iba a ser libre otra vez, nos podíamos encontrar y ser felices.

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