Ciencuenta Agujeros Negros

CINCUENTA AGUJEROS NEGROS:

El libro y lo que trata de interpretar el autor es una muestra de la realidad desde otro punto de vista, desde ese lado que permanece oculto y se convierte en el consecuente escenario de estos relatos que muestran una realidad invertida, y pese a su carácter desconcertante, no se encuentra tan alejada de nuestra realidad.

Los cuentos de Cincuenta agujeros negros, las comparamos con imágenes que no podemos percibir a simple vista, en donde podemos identificar formas.

este mundo visto desde otra expectativa, ya que el escritor nos enfrenta a nuestra propia realidad, y la razón no siempre pueden explicarse de manera apacible.

Cincuenta agujeros negros es una indiscutible demostración de que la fragilidad bien construida, proyectada con exactitud y combinada con la fantasía, procede irremediable en la relectura. Tal vez es aquí donde el título del libro deja de ser un simple enunciado y se convierte en una gran idea. Ya que el artista alcanza a entender que es un trabajo que le requiere una buena perfección.

A lo largo de Cincuenta agujeros negros, el autor presenta una cadena de historias que extienden situaciones cotidianas y ligeras, unas vacaciones, de forma inesperada, aunque siempre con la lógica del absurdo.

Todos estos cuentos, en los que se hace imposible cualquier gentileza entre lo real y lo irreal, entre lo racional y lo absurdo. La brevedad de los cuentos, que nunca se sobrepasa de las dos páginas, no sólo hace la lectura ágil y fácil, sino que también le confiere a los relatos una gran fuerza, una veracidad que cierra la estructura sin dar explicación alguna, dándole vuelta a los principios que sistematizan nuestra idea del mundo.

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