¿CÓMO ELABORAR UN BUEN TEXTO ARGUMENTATIVO?

¿CÓMO ELABORAR UN BUEN TEXTO ARGUMENTATIVO?

Elaborar un texto argumentativo es una tarea fácil si se tienen en cuenta algunos pequeños trucos o consejos.

En primer lugar hay que buscar información sobre el tema que vamos a tratar, algo que parece bastante evidente pero que la mayoría de  la gente no hace. La tarea de documentación es fundamental si se quiere escribir bien sobre cualquier tema.

En segundo lugar, deberíamos intentar plantear el tema desde distintas perspectivas,  es decir, tomar distancia y ponernos en posiciones diferentes a la nuestra. Por ejemplo un tema como el de la eutanasia, que es un tema comprometido, podría abordarse desde la perspectiva del que la pide, desde la perspectiva de sus familiares, desde la de la persona que debe ayudar a morir,  desde la de las personas que lo vemos desde fuera, desde lo que dice la ley respecto al tema o desde la postura de la sociedad en general. Si solo planteamos el tema desde una postura daremos una visión pobre y  bastante parcial del asunto; sin  embargo, la diversidad y la contraposición ofrecen riqueza al texto.

Una vez vistas todas las perspectivas deberemos posicionarnos, ofrecer nuestra propia visión del tema y debemos hacerlo sin miedo, con confianza, con decisión, con sinceridad. Nuestra idea deberá aparecer claramente expresada porque en torno a ella girará todo el texto y esto condicionará todo lo que venga después.

Conviene, antes de escribir, hacer un pequeño esquema organizativo que nos guie en la redacción y sirva para generar ideas y planificar. En este esquema, que será personal y que no tiene por qué ser visto por nadie, plantearemos todo lo que se nos ocurra sobre el asunto que estamos trabajando para luego poder ir dándole forma, estructurándolo. Y hablando de estructura. La estructura de un texto argumentativo es sencilla:

• Tesis
• Cuerpo argumentativo
• Conclusión

LA TESIS

Es la idea que se pretende defender o rebatir. En la tesis lo que hacemos es algo así como una descripción del tema.

Una buena tesis debe:

• Ceñirse al tema, es decir, tener un alcance limitado (un tema muy amplio es difícil de desarrollar)
• Se debe formular de forma afirmativa, evitando palabras cliché, metáforas, lugares comunes,…

LOS ARGUMENTOS

Son, como es lógico, los elementos principales del texto argumentativo. Debes aprender a seleccionarlos. Lo ideal es que sean pocos pero sólidos, firmes y contundentes porque el objetivo de un texto argumentativo es convencer. El orden también es importante. El argumento más sólido deberíamos dejarlo para el final, colocarlo justo antes de la conclusión.

Hay diferentes tipos de argumentos y es bueno usar argumentos diferentes en el mismo texto para hacerlo más variado, más ameno; pero, sobre todo, más creíble.

Tipos:

• de autoridad
• de hechos (pruebas observables)
• de conocimiento general
• de experiencia personal
• de causa-consecuencia
• de ejemplificación
• de mayoría
• de tradición
• afectivos (apelan a los sentimientos)
• de comparación
• citas de figuras de relieve, estudiosos…

LA CONCLUSIÓN

Es la síntesis de lo más relevante que se ha dicho. Debemos retomar la hipótesis inicial.

CONSEJOS ÚTILES PARA LA ELABORACIÓN DE UN TEXTO ARGUMENTATIVO:

• No hagas párrafos  muy cortos puede considerarse síntoma de nerviosismo, desconocimiento, indecisión o inseguridad.
• No hagas párrafos demasiado largos porque llevan a la divagación y el lector puede llegar a  perderse o incluso aburrirse.
• Procura ser ordenado, preciso y claro
• Los párrafos han de guardar relación, las ideas deben estar bien conectadas.
• Evita prejuicios y juicios de valor.
• No caigas en tópicos y lugares comunes.
• Escribe utilizando oraciones completas, con sentido, sintácticamente bien construidas
• Reflexiona antes de escribir, da vueltas sobre las ideas que vas a trabajar.
• Para la PAU, deberías escribir textos de entre 150 y 200 palabras.

RECURSOS LINGÜÍSTICOS:

La lengua nos ofrece toda una serie de elementos útiles para escribir nuestros argumentos y hacerlo con éxito.

• Verbos que indiquen opinión o subjetividad: pienso, supongo, creo, opino, considero, afirmo, declaro…
• Adjetivos valorativos: (con matices connotativos)
• Adverbios: tal vez, quizás, probablemente,
• Pronombres de primera persona
• Apelativos para atraer la atención del receptor
• Plural mayestático: sabemos, debemos, pensamos, creemos, imaginamos,…
• Entonación exclamativa
• Enumeración acumulativa
• Presente como verbo más utilizado y si se puede que este se utilice con valor atemporal
• Uso de la ironía (si se sabe utilizar, claro)
• Interrogaciones retóricas  a lo largo del texto
• Modalizadores  y conectores oracionales para expresar opinión: en mi opinión, desde mi punto de vista, desde otro punto de vista, bajo mi entender, según mi punto de vista,  a mi manera de ver,…
•  Estructuradores de la información
• Comentadores: pues, pues bien, así las cosas, etc.
• Ordenadores: en primer lugar/en segundo lugar; por una parte/por otra parte; de un lado/de otro lado,  asimismo, primeramente, etc.
• Digresores: por cierto, a todo esto, a propósito, etc.
• Conectores
• Conectores aditivos: además, encima, aparte, más aún,  incluso, etc.
• Conectores consecutivos: por tanto, por consiguiente, por ende, en consecuencia, de ahí, entonces, pues, así, así pues, con que, por ello, de ello, por eso, de tal modo que, por tanto, por lo tanto,  etc.
• Conectores contraargumentativos: en cambio, por el contrario, sin embargo, no obstante, con todo,  ahora bien, si bien, mientras que, pero, eso sí, a pesar de que, etc.
• Digresores: por cierto, a propósito,…
• Reformuladores
• Reformuladores explicativos: o sea, es decir, esto es, a saber,  en otras palabras, dicho de otro modo, quiero decir, etc.
• Reformuladores de rectificación: mejor dicho, mejor aún, más bien, etc.
• Reformuladores de distanciamiento: en cualquier caso, en todo caso, de todos modos, etc.
• Reformuladores recapitulativos: en suma, en conclusión, en definitiva, en fin, al fin y al cabo, total, a fin de cuentas, en resumen, vamos que,   etc.
• Operadores argumentativos
• Operadores de refuerzo argumentativo: en realidad, en el fondo, de hecho,  desde luego, la verdad es que etc.
• Operadores de concreción: por ejemplo, en particular, etc.
• Marcadores conversacionales
• De modalidad epistémica: claro, desde luego, por lo visto, etc.
• De modalidad deóntica: bueno, bien, vale, etc.
• Enfocadores de la alteridad: hombre, mira, oye, etc.
• Metadiscursivos conversacionales: bueno, eh, este, etc.
• Rectificadores: mejor dicho, más bien, …
• Conectores para el cierre o la conclusión a la que se llega: por consiguiente, por ende, pues, así pues, en consecuencia, por ello, por lo tanto, por lo que,  para finalizar, finalmente, concluyendo, en conclusión,  por tanto…

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