Don Quijote De La Mancha

Desarrollo

Capítulo VII

1. ¿Por qué Don Quijote inicia la excéntrica aventura?

Esto sucede porque Don Quijote enloqueció de tanto leer novelas de caballería, al pinto de creer todo lo que en ellas leía. En tal sentido vende lo que poseía y se compra armadura, convence a Sancho Panza e inicia su alocado camino incierto. Su meta es salvar damiselas, luchar contra otros caballeros y dragones, defender a los pobres, etc.

2. ¿Cómo convence a Sancho Panza?

Le promete una isla, Sancho accede en principio aunque sabe en el fondo de la locura del Quijote. Es tan así que al final de la obra Sancho enloquece y el Quijote recupera la razón. Ya se observa el punto de enajenación que tenía el Quijote, al punto de usar para sí la persuasión como elemento caballeresco.

3. ¿Cuáles son los ideales del Quijote?

El Quijote hace la diferenciación entre un mundo justo e injusto. Al respecto, se sienta en la imperiosa obligación de ser un héroe en pro del menesteroso, del indefenso, de las damiselas, etc. Él cree ciegamente en sus ideales y en tal sentido no teme a la muerte, estando dispuesto a dar la vida por lo que cree. Es notorio que aunque se burlen de él no desiste en sus propósitos, algunos personajes optan por seguirle la corriente y no avergonzarle en su empresa.

4. ¿Es el Quijote un caballero real?

No, al contrario, es una parodia de las novelas de caballería. Es un personaje que al perder la razón asume ser un caballero sin realmente serlo. Es por ello que sus armaduras son viejas y oxidadas, y él también se halla fuera de forma físicamente, sin entrenamiento militar alguno. Todo lo que hace es imitar escuetamente lo que ha leído en las novelas de caballería.

5. ¿Cómo inicia Don Quijote su segunda salida?

En este capítulo se comienza a narrar la segunda salida de Don Quijote. Una vez repuesto de la paliza, sus intenciones de volver a deshacer desaguisados y ayudar al oprimido se ven reforzadas cuando, en su deseo de leer de nuevo sus libros, se encuentra con que el cuartillo ha desaparecido como por encantamiento, cosa que corroborarán el ama y su sobrina. Esta situación será la que le dé el último impulso a nuestro caballero para volver a sus heroicas acciones.

Para esta segunda salida, y haciendo caso de los consejos del ventero, Don Quijote se busca un escudero, que Cervantes describe como un labrador, hombre de bien, pero con muy poca sal en la mollera, es decir, una persona demasiado inocente; cosa de la que se aprovecha Don Quijote para convencerle de que sea su escudero. Sancho no puede resistir a la tentación de verse gobernador de una ínsula. Estas características son perfectas para el juego que Cervantes hará entre la locura del señor y la inocencia del escudero, que igualará a Don Quijote en sus disparates por estar convencido de que estos son

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