Día de la madre

Este día 10 de mayo, es la fecha en que los sentimientos se subliman al máximo, para festejar al ser más puro y digno de la creación: la madre

No existe ningún ser en la tierra que merezca mayor cariño, mayor consideración, mayor respeto, mayor veneración, que aquel que desde sus entrañas antepone sus sacrificios y sus alegrías por darnos la vida.

La generosidad eterna de la madre, que nos da todo sin pedirnos nada, que a través del amor materno, único, desinteresado, noble, bello, honesto y valiente, merece que hoy y siempre ofrezcamos a nuestras madres, la humilde ofrenda de nuestro cariño y la justicia de nuestra comprensión.

Cada hijo del mundo debe recordar que si bien hay un día consagrado a la madre especialmente, en realidad para los buenos hijos todos los días del año deben ser día de la Madre, por el amor, por el respeto, por la veneración, por la gratitud. Para la madre el hijo es hijo todos los días del año y todas las horas del día y ella es madre también todos los días, las horas y los minutos. Honrémosla, siempre y a través del tiempo.

Madre querida, cómo quisiera que en este día especial comprendieras que todos tus esfuerzos, desvelos y desventuras han cincelado en mi alma los valores necesarios para poder triunfar en la vida; que a ti te debo mi salud, mi educación, mi bienestar y todo lo que soy, que eres la luz de la aurora que a diario ilumina mi existencia. ¡Ay de aquellos hijos que no han comprendido a su madre y que se han desviado del buen camino, pues con esto, lo único que están logrando es hacer sufrir a ese ser que lloró a su lado cuanto estaban enfermos, que rio con sus infantiles gestos, pero

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