EL AGUILA NEGRA

NOMBRE: Thomas Higuita García

EDAD: 11 años

COLEGIO: Institución Educativa Román Gómez

GRADO: 5ª

NOMBRE DEL PADRE DE FAMILIA: Deisy Johana García Gómez

CONTACTO: 3002710356

EL AGUILA NEGRA

Hace muchos años en un pueblo llamado Marinilla ubicado en el departamento de Antioquia un abuelo quiso  una contarles a sus queridos nietos una bonita historia y anécdotas  que le sucedieron en su juventud.

Una de ellas era en su época sus padres eran  distintos a muchos de los de hoy en día, decía el abuelo en nuestro tiempo nuestros padres eran poco amorosos y frenaban  sus sueños, primero porque en vez de  estudiar  nos tocaba trabajar  para poder ayudar  en nuestros hogares, unos de mis grandes  ilusiones fue ser un  gran ciclista, entrene muy duro  participe en varios ciclismos en carretera, llegue muy lejos y  tengo grandes recuerdos de ello, pero un día me hicieron presentar a la fuerzas militares de Colombia. Dure varios años en este lugar y cuando Salí, no pude continuar con el ciclismo por que perdí mi bicicleta y todo mi equipamiento y sus atuendos profesionales  no tenía  forma de como volver a recuperarlos o comprarlos, no me di por vencido y  continúe con otra de mi fantasías. El futbol pero no obstante a esto me quede como el gran  portero que siempre quise ser,  fui una gran eminencia en mi época era uno de los mejores porteros de Marinilla mi pueblo querido en donde me nombraron el águila negra por mis grandes logros y juegos en distintos departamentos.

En el año 1964  estaba en una gran etapa de mi vida tratando de ser un gran portero pero mi padre no le gustaba ese ambiente para mí, cuando me veía  entrenando me decía vete para tu casa,  y de  inmediato salía corriendo para llegar pronto a casa, llegaba triste y angustiado al saber cuál era mi otra excusa para volver a salir  a las canchas, que era lo único que me motivaba, me sentía en una encrucijada, una noche un compañero me llamo a la puerta y me dijo que teníamos partido tarde de la noche que  necesitaba que asistiera porque era una gran oportunidad para ser escogidos  a los departamentales.

No sabía que hacer estaba asustado para salir de casa a esas horas de la noche,  si mi padre me veía, hasta ahí terminaba mis juegos, espere que todos se quedaran dormidos y Salí por el balcón,  llegue a la cancha teníamos mucho público al único que estaban esperando era al águila  negra ( el portero) sentí tanta emoción sentí que el corazón se me iba a salir,  eran tantos sentimientos encontrados que no veía la hora de que empezara el partido, cuando inicio mis compañeros jugaron de una manera sensacional era demasiada adrenalina, cuando  se acercaba el balón a la cancha donde estaba jugando, gritaban “águila negra”  yo me sentía tan emocionado que tenía que demostrarles lo bueno que era cuidando mi cancha y apoyando a mi equipo, este día  todo salió muy bien, tal cual como nos lo imaginamos.

 Ganamos fuimos escogidos para jugar en grandes ligas, terminado el partido todos se quedaban  festejando  y yo tenía que salir corriendo para regresar a casa, sin que mis padres se dieran cuenta que había escapado.

Llegue  a casa   muy silencioso sin que nadie se diera cuenta, al día siguiente muy de temprano desperté tan emocionado que me fui ayudarle a mi papá  a trabajar en su camión de carga, él se quedó tan asustado que solo me pregunto y a ti que te paso,  que bicho te pico?  

Entre risas  le dijo!!!

 Nada papá solo quiero ayudarte. El solo quería  que su papá  se sintiera orgulloso de él  y que él era capaz de hacer muchas cosas sin dejar  sus obligaciones, pero él  era una persona que no demostraba sus sentimientos, no se sabía si estaba feliz o estaba triste.

Papá  vivió en el vereda Belén de Marinilla, Mi mamá  falleció cuando tenía 15 años  tuvo un terrible accidente  en la volqueta de papá.

Un día salieron de casa iban a trabajar a  recoger unos escombros  en el camino algo sonó, cuando ambos se miraron, mamá  salió por la puerta  de la volqueta  todo fue muy rápido la puerta quedo mal cerrada, gritamos inconsolablemente, mamá  falleció de manera inmediata, fueron momentos muy difíciles y muy tristes  para nuestra pequeña familia en ese entonces, era hijo único, papá  se volvió más frío ya no sabía cómo decirle que  quería continuar con mi sueño de ser un gran portero reconocido a nivel mundial. Cada vez que le hablaba del tema me decía  “NO” algo que no entendía el por qué, seguí mintiendo con tal de ir a mis entrenamientos no quería abandonar lo que tanto anhelaba.

...