EL HOMBRE QUE CALCULABA

“EL HOMBRE QUE CALCULABA”

La novela relata la vida de un hombre árabe llamado Hank-Tadé-Maiá, quien en su caminar hacia la ciudad de Samarra se encuentra con un gran calculador, Beremiz Samir, quien debido a su destreza con los números pudo ser distinguido y popular, ya que el podía elaborar grandes operaciones matemáticas y reflexiones acerca de cualquier problema con gran exactitud y así tener resultados correctos. El arte que el realizaba con los números ocasionaba admiración en cualquier sitio donde solucionaba un problema de índole matemática, proporcionando un resultado benéfico para los individuos que presentaban la complicación y a su vez el tomaba ventaja de su experiencia, ya que en diversas ocasiones fue remunerado por su ayuda.

Reflexionando acerca del libro, puedo exteriorizar mi gusto por el mismo, ya que me pareció bastante interesante, debido a que los números son instrumentos básicos en todo momento y útiles en la vida diaria sin importar profesión u oficio. Por otra parte la obra nos muestra como con asistencia de los números, un humilde pastor consigue transformarse en un experto de las matemáticas. Demostrándonos que toda actividad que realizamos requiere de firmeza, persistencia y dedicación, teniendo como culminación una acción benéfica y a su vez la solución de problemas, no importando la severidad de los mismos. Conjuntamente el texto nos estimula a infiltrarnos en el mundo de los números, nos motiva a ir resolviendo y comprobando los diferentes problemas matemáticos que se van presentando a lo largo de la travesía árabe, ayudando a ejercitar nuestro cerebro. Por ultimo puedo exponer que fue sumamente fructuosa y seductora, ya que proyecta elementos matemáticos de una forma sencilla y con modelos claros que te hacen comprender lo que se quiere enseñar y al mismo tiempo nos ejemplifica que somos capaces de resolver cualquier tipo de situación sin importar la rama a la que estemos dedicados o especializados.

Como conclusión el autor brasileño Julio Cesar de Mello y Souza consiguió hacer el contenido de una forma altamente comprensible para cualquier tipo de lector, englobando a los especialistas matemáticos, así como a los faltos de conocimientos numéricos. Logrando juntar sobre un escrito, la práctica, raciocinio y dificultad de las matemáticas, con perspicacia, finura y diversión, en esta obra llena de valores.

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