El Almohadón De Plumas
Enviado por Karla980730 • 17 de Septiembre de 2012 • 1.410 Palabras (6 Páginas) • 810 Visitas
El almohadón de plumas.
Personajes:
Alicia: Karla.
Jordán: Valeria.
Doctora: Diana
Sirvienta: Lidia.
Narrador: Leo.
Narrador: su luna de miel fue un largo escalofrío. Rubia, angelical, y tímida, el carácter duro de su marido heló sus soñadas niñerías de novia. Ella lo quería mucho, sin embargo, a veces con un ligero estremecimiento cuando volviendo de noche juntos por la calle, echaba una furtiva mirada a la alta estatura de Jordán, mudo desde hacía una hora. Él, por su parte, la amaba profundamente, sin darlo a conocer.
Una tarde, Alicia se acercó a su nuevo marido y le dijo:
Alicia-este mes de Abril ha sido muy dichoso, querido.
Narrador-Jordán se quedó helado y no dijo una palabra.
Alicia-¿qué sucede Jordán? ¿Por qué no me has contestado?
Jordán- estoy solo un poco pensativo.
Alicia- ¿en qué pensabas? (dijo curiosamente).
Jordán-mejor deja de preguntar y vallamos a comer a la casa.
Alicia-está bien vallamos a comer pero después me dirás porque razón estas tan serio.
(Se dirigieron al comedor y le pidieron a Cecilia un poco de comida)
Narrador- después de la comida se dirigieron a la sala a conversar un poco
Alicia se acerca a su marido y le vuelve a preguntar por qué razón estaba tan serio y Jordán responde…
Jordán- Yo te amo, mucho, pero no sé como demostrarlo, se que a veces parece que no me importa lo que piensas, pero tú eres lo que más me importa en el mundo en realidad.
(Alicia se conmovió mucho)
Alicia- Oh Jordán (dijo con ternura y pasó sus delicadas manos por su cabello)
(Siguiente día)
Sirvienta- ¿buenas días señorita Alicia como se encuentra usted? (preguntó)
Alicia- buenos días Cecilia, estoy un poco adolorida y me siento extraña pero fuera de eso bien gracias por preguntar.
Sirvienta- ¿extraña? ¿A qué se debe eso señorita?
Alicia- no lo sé por alguna razón me duele la cabeza, pero descuida no es para tanto (dijo gentilmente)
Sirvienta-no, no, le dejaré aquí su desayuno e iré a prepararle un té para que se sienta mejor (dijo, insistiendo).
Alicia-de acuerdo, muchas gracias (respondió mientras Cecilia se iba).
(Tiempo después)
Sirvienta- Aquí tiene señorita Alicia espero y se sienta mejor.
Alicia- gracias, le agradezco lo que ha hecho por mí, desde que llego a esta casa se ha portado de la mejor manera posible.
Sirvienta- De nada señorita estoy para servirle, además estoy muy a gusto aquí. (Dijo muy entusiasmada).
Narrador- Alicia tomó su té y descansó un rato en la sala mientras esperaba el regreso de Jordán. Cuando éste volvió, ellos no pudieron pasar un agradable tiempo juntos, ya que Alicia comenzó a presentar ciertos malestares, y por la noche tuvo un pequeño ataque de fiebre.
(Día siguiente).
Sirvienta- buenos días Alicia ¿Cómo amaneció? (dijo)
Alicia- buenos días Cecilia, ya me siento mejor, pero aún un poco agripada, Jordán dijo que llamaría a la doctora. (Dijo intentando ser lo mejor posible para no alarmar a la sirvienta).
Sirvienta- Me parece bien, usted desayune, aquí estaré para lo que se le ofrezca.
(Más tarde), (sonó el timbre).
Sirvienta- ¿Quién es?
Doctora- soy la doctora Diana vine a ver a Alicia
Sirvienta. (Abre la puerta) pase usted su habitación esta al fondo
Doctora- gracias
(La doctora caminó hacia el fondo y se llevó una gran sorpresa)
Doctora: ¡pero qué mal se ve! (exclamó al ver exageradamente pálida y débil a Alicia)
Narrador: Alicia había caído muy débil, Diana se acercó y empezó a revisarla.
Le pronosticó influenza y le recetó un medicamento. Dijo que si Alicia volviese a sentir algún malestar, le llamaran inmediatamente.
Cuando Jordán volvió de comprar la medicina, Alicia apenas si pudo pararse a tomar el vaso con agua que su marido le ofreció junto con una pastilla.
A pesar de estar enferma, Alicia quería estar con Jordán, e hizo el intento de salir con él al jardín.
Parecía que todo iba bien, caminaron un poco, pero en un momento, Alicia se tambaleó y Jordán pensó que sería mejor que tomaran asiento en una banca situada al lado de una pequeña fuente que había en el jardín.
Jordán- Alicia, ¿te sientes bien? Podemos volver adentro si quieres.
Alicia-no,
...