En La Diestra De DIOS Padre.

En la diestra de Dios padre, es un cuento escrito por Tomas carrasquilla, que relata la historia de un antioqueño llamado Peralta, que se caracterizaba por su generosidad con las personas más necesitadas del pueblo. Por sus grandes cualidades San Pedro y Jesús le concedieron cinco deseos que los supo aprovechar cada uno en su debido momento beneficiando a los demás y a él mismo.

Tomas Carrasquilla escribió este cuento basándose en sus experiencias personales y en sus características familiares, pues fue criado en un pueblo antioqueño y en una familia que se caracterizaba por ser patriarcal y muy religiosa, hechos que lo llevaron a inspirarse en un personaje como Peralta.

¿Cómo se relaciona a Peralta con el típico hombre Antioqueño?

En el cuento se muestra a Peralta como un hombre caritativo que ayudaba a las personas sin discriminar a nadie, “él lavaba los llaguientos; él asistía a los enfermos; él enterraba a los muertos; se quitaba el pan de la boca y los trapitos del cuerpo para dárselo a los pobres…”. Un Antioqueño se caracteriza por ser solidario, hospitalario, cordial y gentil con las personas que necesitan algún tipo de ayuda.

Es muy común ver que cuando llega algún peregrino a la casa de un campesino se le reciba con todas las atenciones posibles. Por ejemplo se matan gallinas en su honor y se les acomoda en las mejores habitaciones, al igual que Peralta lo hacía con sus invitados cuando llegaban: “…con lo menos roto y menos sucio de la casa les arregló la camita en las dos puntas de la tarima.”

Además de ser personas confiables son honestas y honradas, incapaces de quedarse con lo que no les pertenece. Esta característica la vemos claramente en el protagonista del cuento, quien salió deprisa a devolver una bolsa que contenía mucho valor y gracias a este hecho se le acreditaron 5 deseos. “otro que no fuera tan cristiano como vos, se guarda las onzas y se había quedado muy orondo. Voy a premiarte; los dineros son tuyos: llévatelos; y voy a darte de encima las cinco cosas que me queras pedir”. Esto demuestra que muchas veces actuar de forma honrada trae recompensas a nuestra vida, como dice el refrán: a manos lavadas Dios hace merced. Por otra parte, los antioqueños son muy arraigados en sus hábitos y poco abiertos a los cambios, esta característica se expone en el cuento cuando dice: “Peralta con tantísimo caudal como iba consiguiendo, no se daba nadita de importancia, ni en la ropita, ni en la comida, ni en nada: con su misma ruanita pastusa de listas azules, con sus mismitos calzones fundillirotos se quedó el hombre, y con su mismita chácara de ratón de agua, pelada y hecha un cochambre.”

En sus ratos libres los antioqueños se dedican a los juegos de dados y de azar. De esta forma se reúnen con sus amigos a compartir y ganar o perder dinero apostando en el juego. Peralta, el protagonista del cuento, era un hombre que le gustaba

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