Ensayo De Morazan

Memorias Del Manifiesto De David

por ferdinandfortin | buenastareas.com

Casa de Morazán

Tegucigalpa M.D.C. Honduras C.A.

MEMORIAS MANIFIESTO DE DAVID

TESTAMENTO

PRESENTACIÓN

El General Francisco Morazán escribió en la ciudad de David, Panamá, dos de los más importantes documentos con que cuenta nuestra historia: su célebre Manifiesto al Pueblo Centroamericano y la primera parte de sus Memorias, ambos en 1840, año en que el ilustre hijo de Tegucigalpa, nacido en octubre de 1792, abandonó el suelo patrio, hacia el exilio, por el puerto de La Libertad, en El Salvador, a bordo de la goleta Izalco.

Las Memorias permanecieron inéditas hasta el año 1855, mismo en que fueron publicadas en las páginas del periódico vicentino El Rol, como correctamente dice el historiador hondureño don Juan Valladares Rodríguez. En 1870 unos Centroamericanos las mandaron a reimprimir en la Imprenta de Roge Hermanos y Comp., situada en la Rue du Four Saint Germain 43, de parís, ya que el documento era prácticamente desconocido treinta años después de ser escrito y veintiocho años con posterioridad a la muerte del prócer frente al pelotón de fusilamiento.

Los responsables de la edición francesa abrigaban fundadas sospechas- según aseguraron en nota epilogal- de que el General Morazán llamado por Jhon L. Stephens el mejor hombre de Centroamérica, también escribió la continuación del texto en su larga expedición a las repúblicas del sur, sólo que esta parte se habría extraviado o tal vez habría sido ocultada en los últimos tramos de lacarrera política del héroe en algún lugar de Costa Rica.

La Secretaría de Cultura y turismo inicia su programa editorial, con la reproducción de las Memorias, El Manifiesto de David y el Testamento del héroe centroamericano que supo mover la pluma del escritor- como Bolívar en el Mediodía de América- con parejo ademán al empleado al empuñar el acero redentor en el magno cumplimiento de las tareas de la lucha armada para concretar los ideales del progreso democrático, el desarrollo político-social y la unidad de nuestros pueblos.

Tegucigalpa, D,C, Junio de 1986

Declaro: que mi amor a Centro América muere conmigo

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PREFACIO

Entre las muchas cosas cuya satisfacción va siendo cada día más urgente para la mejor marcha y mayor regularidad del progreso en las repúblicas americanas, resalta á nuestro modo de ver, la necesidad de formar historias nacionales traídas desde los primeros tiempos de la conquista hasta la época presente; siendo sobre todo importante la del último período que se abre con la guerra que emancipó á la América de la metrópoli española. Penetrados, pues, de esta ingente necesidad, nos ha parecido útil y oportuno exhumar, por decirlo así, para el público centroamericano, la parte que únicamente ha visto la luz de las Memorias del general Morazán, escritas por él mismo, y que de nuevo aparecen hoy al favor de la benévola hospitalidad del Eco- Hispano- Americano (1)

No creemosafirmar demasiado, enunciado que ese documento histórico es completamente desconocido para muchos Centro- Americanos, como lo era para nosotros hasta hace pocos días, y que habrá quizá sido olvidado por aquellos que han tenido conocimiento de él. Darlo pues a conocer á los unos, y evocarlo a la memoria de los otros, tal es nuestro objeto.

(1) Estas Memorias se han publicado antes en el folletín del Eco Hispano Américano. Nota de la edición de París.

En cuanto al móvil que nos ha impelido á reproducción, esperamos que se nos hará la justicia de creer que no ha sido el espíritu del partido, sino el deseo sincero y patriótico de señalar una fuente de informaciones á los hombres competentes y de abnegación, que quieran acometer la útil aunque difícil empresa de dotar á Centro- América de una historia completa de los años que ya cuenta como nación independiente. El interés histórico nos ha movido tan solo á someter al jurado de la opinión ilustrada e imparcial de los Centro- Américanos la deposición de unos de los principales actores del drama interesantes y provechosos de nuestras revoluciones políticas.

Tanto en Centro- América, como en otras repúblicas del continente, el nombre del general Morazán es bien conocido. Si Norte- América produjo á Washington, si la América del Sur produjo á Bolívar; Centro- América produjo á Morazán. Tres genios identificando en tres secciones del gran continente, las libertades públicas y la soberanía nacional.Cosas singular! Esos tres hombres á quienes guiaba el genio de la victoria, proclaman en tres países diferentes los principios de la república federal. En Centro-América esa gran idea no se mantuvo; así pasó Morazán y pasó

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También la federación; pero la idea quedó, porque es buena, y las buenas ideas germinan en la mente de los pueblos para brotar más tarde un embrión vigoroso.

Nos hemos tenido hasta ahora datos suficientes para publicar la biografía de Morazán, y no podemos transcribir más que los fragmentos d sus Memorias, cuya conclusión debe existir en Costa- Rica. Dejamos á la iniciativa de nuestros compatriotas el llenar este vacío.

En estas cuantas páginas que el lector va á leer, encontrará al hombre sincero y deseoso del bien de su país, al hombre que, bajo el uniforme de militar, esconde un espíritu recto y elevado, y un corazón paternal y amante del progreso. Tal fue Morazán.

Hoy que su vida y su memoria entran en la historia, no le queda más que recoger, como los mártires de la patria, ó el olvido é ingratitud de sus compatriotas, ó los laureles de su gloria.

No debemos desconocer el mérito de nuestros grandes hombres, cualquiera que él sea. Todas las naciones cultas prueban todos los días, con grandes monumentos, con estatúas y panteones, el tributo que deben á sus hijos beneméritos. Es el mejor modo de ensalzar la patria.Que no olvide Sur- América lo que debe al gran Bolívar; que no olvide Centro-América, y sobre todo el Salvador y Honduras, lo que debe á Morazán: más que una estatúa es la memoria imperecedera de sus inmortales glorias.

Unos Centro- Americanos

Paris 30 de julio 1869

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MEMORIAS

DEL BENEMERITO GENERAL

D. FRANCISCO MORAZÁN

Para escribir la vida de los hombres públicos que han figurado en tiempos pacíficos bajo un

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