Ensayo Postdramático

ENSAYO TEXTO POSDRAMÁTICO

El concepto posdramático intenta describir un conjunto de expresiones artísticas que ocurren en Europa desde los años 60 justo ámbito de la crisis simbolista y el posterior estallido de las vanguardias históricas, para así obtener mayor cabida en el área del espectáculo, de modo que el sentido profundo del hecho teatral deja de situarse en el texto y se desplaza ahora en el conjunto total de la puesta en escena, esto quiere decir que reflexiona de manera exhaustiva sobre su constitución como es la construcción del lenguaje, que es a menudo un texto de teatro el cual dejó de ser dramático. Esto quiere decir que se demuestra la interdepencia entre el texto y el teatro, o sea aquí el discurso del teatro toma el papel principal y el texto se percibe más bien como elemento o material para complementar la escena, es decir, no obtiene un papel dominante, un complejo conjunto de elementos que no permiten una lectura lineal basada en un entendimiento racional de la obra, y donde el espectador ya no puede tener un rol pasivo, sino que debe responsabilizarse de la experiencia vivida.

Su principal objetivo es poner de relieve ciertos aspectos que permitan diferenciar las prácticas teatrales contemporáneas de todas aquellas que marcaron la diferencia o mostraron algo nuevo en otros momentos. Se trata, por otro lado, de construir diversos instrumentos teóricos que faciliten la discusión teatro posdramático de manera positiva y no simplemente como negación de algunos modelos anteriores a éste.

Este tipo de teatro no deja de ser una reflexión sobre el propio teatro, lo cual se ve representado como una defensa radical de esta inmediatez y sentido colectivo que caracteriza el ámbito teatral y que solo puede ser captada desde su propio ser, no ya como proceso, sino más bien dicho para el proceso. La actitud de normalidad de los actores en la escena, su estar-ahí a menudo durante todo el transcurso, incluso cuando no les toca actuar, conviviendo en escena, más allá de la realización concreta de su papel, les hace adquirir una vocación de actuación antes que de interpretación, de salir a hacer algo, lo que transforma la escena en un espacio de operaciones.

Desde este punto en relación a la colectividad y encuentro, la participación del espectador se resalta una vez más como un elemento fundamental en el estilo de este tipo de teatro. Este carácter está profundamente ligado al proceso que se extiende a través de las relaciones de unos con otros y que solo existen en el aquí y ahora nada más desde su estructura física. Finalmente se habla de una experiencia emocional que entra a través de los sentidos, de forma inmediata, y que sólo esto se hace posible dentro del acto de compartir un espacio y un tiempo.

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