Guerra De Las Malvinas

GUERRA DE LAS MALVINAS

En 1981 un nuevo régimen militar tomó poder en Argentina, era el comandante Leopoldo Galtieri, quien tenía un mando de terror, y estaba colapsando, por lo cual buscó una causa que ganara popularidad para el gobierno, y Galtieri sabía que el reclamo de las Malvinas uniría a la nación de Argentina.

Ya el 2 de abril de 1982, 100 infantes de marina argentinos invadieron las Islas Malvinas, con el objetivo de capturar la Capital, Stanley y obligar al gobernador Británico a rendirse. Ellos solo fueron el grupo de avanzada. Por su lado los Británicos defendieron las islas sólo con 69 infantes de la Royal Navy, lo que obviamente se puede considerar una frustración al no poder realizar ninguna acción en defensa, ya que no solo se encontraban en desventaja frente a los vehículos armados que se estacionaron frente a la casa del gobierno, sino que además se encontraban demasiados distantes a Gran Bretaña.

Fue ese grupo de avanzada los que tomaron la ciudad Capital, luego de esto el Gobernador y los Infantes de Marina de la Royal Navy fueron enviados de vuelta a Gran Bretaña, mientras que los isleños quedaron aislados y sin protección. Dicha acción llegó inmediatamente como noticia en Buenos Aires, por lo que los Argentinos celebraron, ese hecho confirmó que el plan de Galtieri había funcionado, pero debido a su confianza, pensó que debido a la distancia y porque las Islas no eran de interés para Gran Bretaña, ellos no lucharían por ese territorio, fue esa confianza su error crucial. Tales hechos evidenciaron claramente el tipo de conducción de los Argentinos, el hecho de que Argentina estaba regido por un gobierno militar, ocasionó que el mando sea estricto, con confianza, resolución y disciplina, estableciendo sus objetivos basados en el reclamo de las Islas Malvinas causando terror en la ciudad capital y pueblos aledaños, todo eso para que el gobierno pudiera ganar popularidad con sus ciudadanos, pues estaban confiado que Gran Bretaña cedería las islas sin dar pelea.

Al principio Gran Bretaña había considerado la entrega de las islas a Argentina, pero es entonces que se evidenció un conflicto, pues a los isleños les gustaba su identidad Británica y no querían renunciar a ella, es por eso que no se llegó a ningún acuerdo entre Gran Bretaña y Argentina.

En 1982 Gran Bretaña era un país que se encontraba en problemas, uno de ellos era el desempleo, la cual sobrepasaba los tres millones, pero Margaret Thatcher sabía que si renunciaba a las Islas Malvinas, tal hecho podía llevarla al fin de su gobierno, por lo cual dio una repuesta desafiante a Argentina, ordenando el desplazamiento de un grupo de tareas tan pronto como estén listos, encabezando el HMS INVICIBLE, dicho grupo de tareas estaba compuesto por buques de guerra, de suministros e incluso unos cruceros de lujo. El corazón de la flota eran dos portaviones (HMS Invicible y HMS Hermes). El HMS Hermes era el buque insignia y el Comandante del Grupo de Tareas era el Almirante Woodwart. En sí, Gran Bretaña envió una fuerza de tareas naval y 15000 hombres. Ellos decidieron entrar en guerra con Argentina, aunque sus posibilidades eran enormemente desiguales, puesto que luchaban para combatir 13000 Kms apartados de su territorio nacional. Son estos los hechos que demuestran la conducción de los Británicos, pues la dirección de las decisiones las tomaron el gobierno (la primera ministra), quien era la máxima autoridad en Gran Bretaña, y pareciera que sus decisiones se basaron en la famosa frase de ¨La libertad no es gratis¨, pues aunque su pueblo no se encontraba en las mejor situación económica, hizo que Gran Bretaña creyera en que podían salir adelante defendiendo su territorio, además que las Fuerzas Armadas de ese país basó su conducción en delegar las responsabilidades a personas que conocían su oficio como lo eran el Almirante Woodwart, Coronel H Jones, Brigadier ThoMpson, entre otros, además que cada uno de ellos emplearon sus unidades a cargo de acuerdo a sus capacidades lo que los hacía ser más eficientes al momento del combate.

Por tal motivo Argentina vio con preocupación la respuesta militar Británica a la invasión, su ejército se encontró en frustración, porque ellos estaban compuesto por pocos soldados profesionales, y la mayoría de sus hombres eran conscriptos inexpertos, lo que vieron como debilidad de sus fuerzas. A finales de abril habían 13000 tropas Argentinas en la isla, y con ellos su nuevo Comandante, el General de Brigada Mario Menéndez, él era un soldado duro que había luchado contra los rebeldes en zonas remotas de Argentina, y prontamente fue nombrado como Gobernador de las Malvinas, su primera tarea fue preparar sus defensas. Estratégicamente la posición de Menéndez era fuerte, él puso a la Fuerza Aérea Argentina en el continente debido a los escasos 600 kms que se encontraban distantes de las islas, además de colocar estratégicamente a sus hombres en las diferentes islas (2000 en la isla Gran Malvina, 1000 hombres en Goose Green y cerca de 10000 hombres en los cerros situados al oeste de Stanley, con esa distribución, Menéndez tenía previsto que sus hombres no peleen en tierra sino neutralizar el grupo de tareas Británico en el mar.

Para aquello, la Fuerza Aérea Argentina era muy bien entrenada y con sus aviones eran capaces de atacar al grupo de tareas cuando ellos estuvieran dentro del rango, mientras que por su lado los Británicos sólo tenían disponibles a los aviones que podían cargar en sus portaviones, los cuales daban un total de sólo 34 aviones contra más de 100 Caza bombarderos Argentinos, dicha Fuerza pequeña tenía la misión de ganar la superioridad del aire, proteger a la Flota, y preparar el camino para el desembarco anfibio.

Es así que el 01 de Mayo de 1982, la batalla por las Malvinas comenzó, y el primer enfrentamiento entre Gran Bretaña y Argentina se dio en el aire, donde Gran Bretaña demostró que su fuerza en el aire debía ser respetada, más aún con su nueva adquisición ¨El Sea Harrier¨, el cual era capaz de despegar y aterrizar verticalmente demostrando así que era versátil, fue usado por primera vez en combate en la Guerra de las Malvinas, además que estaba armado con el último modelo de misil termo guiado aire-aire llamado SIDEWINDER.

Tan sólo en el primer día, 4 aviones Argentinos fueron derribados por los SIDEWINDER de los Sea Harrier, luego seguirían otros 15, es decir que los Británicos en ese momento estaban destrozando a la Fuerza Aérea Argentina, ocasionando frustración en ellos, pues ellos eran los que tenían la superioridad numérica y su necesidad era destruir a los portaviones, sin embargo los Británicos no dejaron que eso sucediera, obviamente porque sabían que si los perdían, también perderían a sus tan vitales aeronaves. De este modo

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