Guion teatral basada en una leyenda

Los tzipitios de la caña

ESCENA 1

-Entra don Luis

-Narrador <> pensó don Luis.

-Narrador: sim embargo los planes de don Luis se verían afectados…

Entra capataz corriendo y gritando ¡Patrón, Patrón!

-Don Luis: ¿Qué paso Adolfo? <> pensó don Luis

-Capataz: La caña se dañó, ayer la dejamos bien puesta y hoy amaneció podrida.

-Don Luis: ¡Que! Esto no puede ser posible.

-Capataz: Al menos no fue toda don, un poco aún está bien.

-Don Luis: Ahorita voy para la plantación.

Narrador: Don Luis se dirigió a la plantación muy enojado por lo sucedido ya que pensaba que era culpa de los trabajadores.

-Don Luis: ¡Ustedes tienen la culpa! No pueden cortar bien la caña.

-Trabajadores 1, 2, 3: No patrón no fuimos nosotros

-Trabajador 1: Nosotros cortamos bien la caña, la dejamos bien colocada y hoy que venimos apareció podrida.

Don Luis: ¿Si no fueron ustedes quien fue?

ESCENA 2

Narrador: Mientras don Luis se dirigía al campo el hijo destruía unas ramas cuando llego su amigo y se pusieron a platicar sobre la caña podrida.

-El pequeño Luis: Si ya te lo dije, la caña amaneció podrida y el capataz dice que si la cortaron bien.

-Jose: Mira la caña no fue mal cortada, eso fue obra de los tzipitios.

-El pequeño Luis: ¿Tzi que?

-Jose: Tzipitios, unas pequeñas criaturas.

-El pequeño Luis. No sé de qué me hablas.

Narrador: Don Eusebio estaba al otro lado de la casa, tocando una guitarra y observando el campo.

-Jose: ¿Don Eusebio?

-Don Eusebio: Ay, me asustaste patojo.

-El pequeño Luis: Perdón, es que venimos porque quería saber acerca de los tzipitios.

-Don Eusebio. Está bien, sentate ahí –señala una butaca

Narrador: Él les explico que los tzipitios son pequeños criaturas provienen del monte y que ellos pudrieron la caña porque don Luis había movido piedras sagradas cuando extendió la siembra de caña.

-El pequeño Luis: Tengo que contarle a mi papa.

-Jose: Anda jugamos al rato.

Entra don Luis: Hijo amarra al caballo.

-El pequeño Luis: Papa, los que están arruinando la caña son los tzipitios.

-Don Luis: Que tonterías dices esos son inventos de los trabajadores para que no los regañe.

-El pequeño Luis: Es la verdad, me lo dijo don Eusebio.

-Don Luis: Si lo dijo el no creo que sea una broma.

-El pequeño Luis: Que ocurrió porque moviste unas piedras que son sagradas, un monumento para los tzipitios eso los molesto y para que ya no se pudra la caña tienes que reunir todas las piedras y volverlas a dejar en su lugar.

-Don Luis: No lo creo hijo, reunir las piedras no hará que la caña ya no se pudra, ni que estén en paz esos tzipitios.

Entra trabajador 2: ¡Patrón! La caña se secó cuando la llevábamos para el molino.

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