Intertexto en obras “Los Miserables” y “Dr. Jekyll y Mr. Hyde”

Intertexto

En cuanto a la intertextualidad, es posible mencionar que Robert Louis Stevenson para realizar su obra “Dr. Jekyll y Mr. Hyde” que fue publicada en 1886 se inspiró en el escritor Víctor Hugo, específicamente en su obra Los Miserables, misma que salió a la luz en 1862.

En la obra “Los Miserables” se encuentran inmersos temas como: la ambigüedad entre el bien y el mal, así como también una fuerte crítica hacia la política, la ética, la justicia y la religión.

En la obra “Dr. Jekyll y Mr. Hyde se abordan temáticas como la dualidad entre el bien y el mal, el trastorno disociativo de la identidad, la moral y la naturaleza humana.

En la obra “Los miserables” se narra la historia de un ex convicto Jean Valjean, el cual al encontrarse sin trabajo ni dinero y con una hermana y un sobrino a quienes alimentar, decide robar un pedazo de pan. Por esta acción y sumado a ello sus comportamientos rebeldes, es condenado a 19 años de prisión. Durante este tiempo, Jean Valjean reconoce que el bien y el mal son absolutos, y si él es juzgado como alguien malo, debe comportarse de esa forma, esta visión la comparte con su alter ego el inspector Javer.

Ahora bien, en la obra “Dr. Jekyll y Mr. Hyde” se cuenta la historia de cómo el doctor Jekyll, un individuo reconocido y de alta clase social, fue capaz de separar a través de una fórmula el bien y el mal de una persona, donde la maldad en este caso, es representada por Hyde, quien comete crímenes terribles sin tener compasión o piedad por los demás, y la representación del bien en el doctor Jekyll, aunque no hay que olvidar que ambas personalidades son parte de la misma persona.

En ambos casos, llega un momento en que la moral se sobrepone ante las acciones de estos personajes, por ejemplo, en la obra “Los miserables” Jean Valjean concientiza ante sus actos y deja de lado la vida de robos, convirtiéndose así en un hombre de bien que ayuda al prójimo. En el caso de la obra “Dr. Jekyll y Mr. Hyde”, el doctor concientiza sobre todo el daño que hizo a los demás al estar transformado en Hyde y se avergüenza de sus acciones, a tal punto de encerrarse dentro de su habitación hasta su lecho de muerte, privándose así de su propia libertad.

En conclusión, en ambas obras es evidente como todo ser humano lleva en su interior bondad y maldad y dependiendo del contexto una sobresale más que otra. Sin embargo, debe existir un equilibrio entre estas dicotomías para no descarrilarnos de este tren llamado vida.

Alusiones Bíblicas

El escritor Robert Louis Stevenson al ser formado en un hogar presbiteriano se dio cuenta que en la biblia hay fragmentos que permiten delimitar el bien y el mal. En ese sentido, utiliza uno de ellos en el primer capítulo cuando el narrador Utterson menciona “Me inclino por la herejía de Caín —solía decir pintorescamente—: dejo que mi hermano se vaya al diablo por su propio pie»”, es decir que actué como le plazca. Entonces, la referencia al Génesis 4 no funciona como una salida elocuente, sino que también es un presagio, pues su buen hermano (Jekyll) debe asesinar al mal hermano (Hyde) por así decirlo, para que pueda salvar al mundo de los actos de un enfermo. En el Génesis el mal hermano fue (Cain), puesto que él mató al buen hermano (Abel). Aun así, esta comparación es válida porque Hyde desea hacerse con el cuerpo y las posesiones de su hermano mayor. De hecho, la deformidad física con la que cuenta Hyde, que repugna a cualquiera que lo ve, y esto podría relacionarse con el hecho de llevar la marca de Caín, es decir el primer asesino.

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