Inés De Isabel Allende

Esta decidida mujer se embarcó en una de las historias más aterradoras de la historia: la conquista del territorio chileno, acompañando a su amante, Pedro de Valdivia. El coraje de ésta fémina fue fundamental en el desarrollo de las colonias en Chile, así como también su maternalidad y preocupación, que acogió a los desvalidos, rol que no por muchos ha sido reconocido. Pero así como ‘Doña Inés’, muchas son las mujeres que han desempeñado papeles imprescindibles en diversas situaciones, pero que han sido opacadas por la figura masculina que acompañan.

“- Pensé que… ¡Dios mío! Vos salvasteis la ciudad, doña Inés. Vos pusisteis en fuga a los salvajes…”

Página 229, Inés del alma mía, Isabel Allende.

“…y ellos jamás imaginaron que yo terminaría fundando un reino.”

Página 255, Inés del alma mía, Isabel Allende.

Si bien Inés de Suarez es recordada como la fiel acompañante de Pedro de Valdivia, su labor fue mucho más allá del apoyo que entregó al conquistador. Doña Inés se unió a las huestes de Valdivia como la única mujer blanca integrante de la expedición que terminó en la conquista del territorio chileno. Luego de una larga travesía, ardua incluso para los más valerosos hombres, dado lo inhóspito del paisaje, se estableció en medio de numerosas batallas contra el pueblo mapuche donde Inés tomó parte del cuidado de los hombres heridos, así como de la defensa del refugio de los mismos, se estableció la capital del Reino de Chile, cuyo gobernador sería el propio Pedro de Valdivia.

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