LAS CONCLUSIONES, EXIGENCIA O SALVACIÓN

LAS CONCLUSIONES, EXIGENCIA O SALVACIÓN

Las conclusiones concluyen un escrito o enfatizan los principales puntos tratados en la exposición o debate, entonces nos permitimos decir que una conclusión tiene dos grandes exigencias, la primera es que la conclusión bien elaborada será entendida por el receptor y paralelamente la segunda es que resulta nuestra tabla de salvación, para los que se nos dificulta captar el tema de lo leído o escuchado.

Pues bien, poniéndonos en la posición de receptores es frecuente que en el transcurso de cierto tema vayamos quedando cortos en su comprensión, de manera que esperamos alcanzar en la conclusión la interpretación total de lo leído o escuchado. Y en caso que ya no estemos como receptores sino como emisores resulta nuestra última oportunidad para organizar las ideas en pocas palabras y persuadir a los lectores de que adopten nuestro punto de vista.

Por ejemplo, nosotros como futuros administradores de empresa estaremos entablando negociaciones con otras personas, al final de la reunión requeriremos de tener un buen nivel de comprensión para concluir sobre los temas tratados y al igual convencer a la otra parte de que el negocio merece realizarse.

Sin embargo, no es tarea fácil concluir un tema cuando no se tiene una preparación al respecto, es por eso que creemos que este ensayo es un buen ejercicio, que aunque no seamos expertos, estamos cumpliendo y dando las ideas más organizadas posible; queda definido que las conclusiones tienen cierto grado de exigencia para que no sean desapercibidas.

Finalmente la manera de concluir puede ser en interrogante, en anécdota, en síntesis, por analogía o en afirmaciones, podemos adoptar cualquiera de estas cinco opciones, la cuestión es -¿cuál de estas es apropiada y en que momento?.

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