LOS SUSURROS DEL TIEMPO Y EL GRITO DE LAS PIEDRAS

LOS SUSURROS DEL TIEMPO Y EL GRITO DE LAS PIEDRAS

Es bien visto y conocido en la sociedad, que los estigmas y prejuicios hacia los pueblos abandonados del Perú, están bien marcados en la actualidad, es cierto que errar es humano, pero ser tan sumisos y ciegos para no ver ese incandescente sol de conflictos que apaña nuestra vista sosegada, me parece erróneo tratarlo de ocultar; por ello están retratados en los ilustres que fueron inspirados de la cruda realidad, desenvolviéndose muy bien al momento de contar sus experiencias mediante literatos, planteándonos preguntas como ¿somos útiles o “intrusos en el reino de la muerte”?¿con que propósito venimos al mundo?;preguntas que se encuentran muy sutilmente escondidas y retóricamente hablando, nos gritan y cuentas las historias que el viento trajo hasta nuestros días.

La novela “Todas las Sangres”, es uno de los muchos escritos en donde su autor, José María Arguedas esconde sus estigmas de manera muy sutil, como es el ejemplo de lo sucedido en “San Pedro”, lugar en donde se datan los hechos de la obra, durante su transición hacia una nueva era, podría ser el reflejo de su sentimiento por el desarraigo cultural que él vivió, por otra parte el personaje de Redon Wilka como fruto de posterior revolución, deja en visto que Arguedas asimilaba que el indígena es un ser con dignidad, por el hecho de que él, en su niñez fue acogido por los hijos de la pacha mama.

Su trama consiste en lo siguiente; Fermín, quien es propietario de la mina Apak’oraK, la explota con ayuda enviada de su hermano Bruno, asimismo tratando de seducir a sus señores para que se traicionen unos a otros a causas de enclaves que ellos hacían gracias a los sobornos, consiguiendo su objetivo inicial y para completar la situación caótica del pueblo, los indios se niegan a trabajar sin sueldo, abandonando así el ayuntamiento del pueblo ante el enojo de los señores. Mientras tanto Cabrejos, quien por su parte es un  agente secreto de la compañía que quiere apropiare de la mina, crea dificultades para que sus ventas de la mina de plata se retrasen y por lo subsiguiente, logran su objetivo. Ahora con la ayuda de un mestizo, Gregorio, pretenden ahuyentar a los indios que trabajan allí, pero es tiro les sale por la culata pues los indios se quedan trabajando en la mina venciendo su “temor mítico” el AMARU; que según sus antiguos propietarios es una serpiente que habita en los socavones; y mientras los nativos cuestionan los mitos porque estos estorban su desarrollo, se abren paso a un cambio cultural selectivo. Debido a estos hechos, la compañía consigue una orden judicial, obligando a los señores de SAN PEDRO a vender sus tierras, provocando que a su vez ellos quemen el pueblo en son de protesta. Por otra parte Bruno después de tener su momento de “iluminación” o epifanía, se une con una mestiza llamada Vicenta, fruto del cual emergerá el vehículo para su transformación, Redón Wilka; y así Bruno, redimido por el amor, termina ayudando a los comuneros al enfrentarse a hacendados abusivos sim embargo es llevado la cárcel, por ende Redón Wilka es enviado de modo incognito para convencer a los indios de las haciendas de que son fuertes y deben sublevarse ante sus opresores; cumpliendo así su última misión de despertar las consciencias de sus hermanos andinos habiendo dejado abierto su camino para la liberación antes de ser fusilado.

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