La Ilustracion Y Romanticismo

UNA LITERATURA DIDÁCTICA Y MORALIZANTE

El siglo XVIII no presenta en todas las literaturas europeas unas características uniformes, y sin embargo, un hecho fue decisivo en ellas: la influencia del siglo XVII francés.

En sentido estricto, la Ilustración no contiene una estética propia. Sus esfuerzos se encaminan a la divulgación científica y crítica; sin embargo reconoce en el clasicismo un sistema artístico acorde con sus intereses ideológicos. Después de movimientos artísticos como el preciosismo y el rococó (ambas estilizaciones del Barroco), surge en Francia una intensa corriente de regreso al clasicismo. Diáfanos, equilibrados y cosmopolitas, el Renacimiento y la Antigüedad ofrecieron un modelo a los artistas franceses del XVII y XVIII y Francia se convirtió en modelo europeo.

Los principios del Neoclasicismo fueron establecidos por Nicolas Boileau (1636-1711), para quien razón y moral constituyen las normas de la literatura, tal y como establece en su obra Arte poética. La literatura, según los autores neoclásicos, debe someterse a cuatro principios clásicos:

✓Universalismo. Las historias deben ser universales, deben servir para cualquier época y país.

✓Verosimilitud. Los argumentos que se escriban deben ser verosímiles. No deben ser fantásticos ni imposibles.

✓Uniformidad estilística. No se deben mezclar estilos, ni tragedia y comedia, ni, tampoco, prosa y verso en una misma obra.

✓Didactismo. Las obras literarias deben tener una finalidad educativa. Deben servir para que el lector aprenda y además deben ser «morales» y «decentes».

En todas las producciones literarias se aprecia un predominio de lo racional sobre lo imaginativo, al mismo tiempo que se insiste en lo sentimental y lo didáctico. Un espíritu de crítica y de polémica hará su aparición, naciendo entonces las ciencias naturales y la crítica literaria. Lo filantrópico y la tendencia a educar con la literatura serán otras de las notas características. De ahí procederá el gusto por la fabulística y un teatro con finalidad docente.

En términos generales, si se hace un balance del siglo, en cuanto a los géneros literarios, se constata que la poesía, dependiendo del país en cuestión, casi no existe, sino en su forma anacreóntica o de idilios pastoriles (influencia del Renacimiento), o bien como fábulas didácticas de carácter social y, en ocasiones, de tipo mundano. No es éste un siglo poético. La prosa de ideas, por el contrario, se desarrolla ampliamente. La prosa filosófica, sea el ensayo, sea el discurso, es la más importante. También se cultiva la prosa polémica, muy relacionada con el periodismo. La novela cambia por completo de carácter. Nacen la novela filosófica o de ideas y la novela sentimental. La literatura epistolar es ya un género aparte, y lo mismo, en general, toda la literatura íntima de confesión, como los diarios. Se

...