La verdad es que cada vez que papa se emborrachaba, se lo reprochaba a ella como si fuese la única culpable. Antes de la porquería nosotros vivíamos muy bien.

EXT.CAFETERÍA/TERRAZA-DÍA

EDUARDO

Mi madre era muy fuerte, linda y tenía buenos colores.  Usted seguramente pensará que el viejo toda la vida se arrumbó, pero no.  A papá lo destruyó una porquería que le hicieron.  Fue precisamente un primo de mi mamá, yo nunca supe que fue lo que le hizo pero mi mama se disculpaba en cierto modo porque sentía un poco responsable.

Eduardo hace una pausa y mira al amante de su madre mientras suelta un suspiro.

EDUARDO

La verdad es que cada vez que papa se emborrachaba, se lo reprochaba a ella como si fuese la única culpable. Antes de la porquería nosotros vivíamos muy bien.

EDUARDO

Pero no teníamos mucho dinero.  Hubo muchos días en que pasamos hambre, pero en esa época por lo menos había paz.  El viejo no se emborrachaba, ni nos pegaba, y a veces nos llevaba a la matinée.

AMANTE

Debió ser una época muy tranquila y feliz para ustedes.

EDUARDO

Se puede decir que si, antes de la porquería mi padre era un poco alunado, a veces podía estar mucho tiempo sin hablarnos, pero por lo menos no nos pegaba ni insultaba a mi mama

EDUARDO

Claro, que después vino la porquería y él se derrumbó, empezó a ir al boliche y a llegar siempre después de medianoche con un olor a grapa que apestaba. En los últimos tiempos era peor, porque papa es un hombre grandote y le tenían miedo.

EDUARDO

A veces yo no iba a la escuela, pero no para hacer la rabona sino para quedarme rodando la casa, ya que siempre temía que el viejo llegara por el día y moliera a mama a golpes.

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