Mente de un condenado

Mente de un condenado

¿Qué paso? ¿Qué hecho? Me siento mal, ya no tengo nada que hacer, desperdicie todo las oportunidades que tuve , defraude a las personas que confiaron en mí y a pesar de eso lo sigo asiendo ¿Por qué? aun después de perder las esperanzas de ser la persona que sueño ser, no hago nada por cambiarlo , ya no se que hacer a quien acudir ,y quien me podría dar más ayuda sabiendo que puede ser que no la aproveche al igual que toda la ayuda que tuve .Por qué no puedo comprender que si sigo como estoy perderé hasta lo último que dicen que es imposible perder, la esperanza y la confianza de los padres , que a pesar de todo aun confían en que seré una persona de bien. Los quiero papá y mamá.

Palabras de un chico que, aun no sabe que es un no se convierte en “hombre”. Las chicos piensan que la palabra “hombre” se ganan por la edad, al igual que las chicas esa palabra “Hombre” o “Mujer” solamente se le dice a las personas que toman sus propias decisiones, sabiendo las consecuencias o beneficios que le traería cuya decisión, el Hombre y la mujer de verdad sigue una decisión son perseverantes y seguros de sí mismos, trazando un futuro de logros que ellos se pusieron como meta.

Regresando al chico asustadizo, temeroso después de a ver visto, que todo lo que ahecho asta hora es un total nada, está perdiendo el tiempo de juventud y las oportunidades que le han dado, un chico que creyó que la apariencia y el qué dirán es más importante que todo. Un chico que simplemente creyó que toda la vida i va a tener a toda la gente que le ayudado hasta hora. Un chico ególatra, creído y que siempre quiso tener toda la atención asiendo barbaridades con mentiras tras mentiras. Chico tonto que no sabe que la vida es solo una, i que los años pasan y no es fácil recuperar los años que desperdiciaste por simples tonterías. Que ría ser todo, pero hasta hora no es nada, ¡chico tonto! Razona ya, piensa ya.

Chico – ya no se que hacer, ya no hay esperanzas para mi, que hago, que ago. ¡Qué hago!

Pensando él se quedo un recuento de su vida miro.

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