Prohibición de las corridas de toros en Ecuador
Enviado por Mateo Vallejo • 10 de Abril de 2016 • Ensayo • 2.001 Palabras (9 Páginas) • 3.266 Visitas
Mateo Vallejo
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Miércoles 13 de Mayo de 2015
Ensayo Contra argumentativo
Prohibición de las corridas de toros en Ecuador
“Es increíble y vergonzoso que ni predicadores ni moralistas eleven más su voz contra los abusos hacia los animales”
-Voltaire
La tauromaquia, denominada coloquialmente como “corridas de toros”, es un espectáculo que consiste en la lida de un toro, a pie o a caballo, por parte de un torero o también conocido como matador, quien le pone fin al espectáculo con la matanza del animal. Esta práctica se remonta a la Edad de Bronce en países Europeos como España y Portugal. Posteriormente dicha tradición fue heredada a países hispanos como Ecuador, Perú, Venezuela, entre otros. En los últimos años ha surgido un polémico debate entre taurinos y activistas defensores de los animales acerca de la prohibición de las corridas ya que estos últimos alegan la existencia de maltrato y crueldad animal. Existen algunos argumentos fuertes en contra de las corridas y es por esto que ya varios países han prohibido el espectáculo taurino en su totalidad.
La tauromaquia, según el diccionario de la Real Academia Española, es el arte de lidiar toros (2014). Las corridas de toros son consideradas por los fanáticos como una tradición antigua, así como un componente cultural y artístico de la sociedad. Uno de los argumentos pro-taurinos más conocidos es que la tauromaquia es un arte, que transmite belleza y una visión del mundo y que representa la valentía del hombre que enfrenta a un animal fuerte y bravo que muere con honor. Al ser la tauromaquia una tradición ancestral y parte de la cultura, esta debería ser respetada y preservada en honor a la cultura.
Según la RAE el arte es una actividad o producto realizado por el ser humano con una finalidad estética o comunicativa, a través del que expresa ideas, emociones o, en general, una visión del mundo, mediante diversos recursos, como los plásticos, lingüísticos, sonoros o mixtos (2014). Las corridas de toros tienen como fin expresar una visión del mundo, una visión egoísta en la que se fomenta el antropocentrismo, en donde el hombre es un ser superior capaz de dominar al mundo sometiendo a otras especies con las que compartimos el planeta. Es dudosa la finalidad estética de la tauromaquia debido a la abundante violencia y a la sangre y vómito del animal. En fin, el arte es muy subjetivo y puede que para algunos las corridas sea arte pero muchos no lo es porque el arte nunca justifica la crueldad.
Para muchos las corridas son espectáculos violentos en donde un animal es obligado a “luchar” en contra de su voluntad, es torturado y finalmente asesinado. Si bien es cierto que las corridas de toros forman parte de una antigua tradición y son parte de la cultura, esto no quiere decir que deba perdurar. La civilización humana se ha caracterizado por progresar durante el tiempo y aprender de sus errores. Por ejemplo, la lucha a muerte entre gladiadores era un fuerte componente de la cultura romana y como todos sabemos esta práctica sadismo desapareció. Las buenas tradiciones en efecto deben ser conservadas, pero tradiciones que no aportan más que el sufrimiento y la humillación de un animal deberían ser abolidas. Es por esto que países hispanos como Uruguay, Chile y Cuba prohibieron la tauromaquia muchos años atrás.
Otro argumento que los taurinos usan para defender su arte es que el toro disfruta de una vida plena antes de ser sacrificado. También alegan que los toros no sufren al momento de su muerte ya que el torero tiene una gran habilidad para encajar el espadazo final en la espalda del animal para que muera de forma inmediata. Finalmente se defienden al comparar el ganado de lidia con el ganado de la bio-industria y dicen que los animales sufren igual o más que los toros de lidia y sin embargo nadie se queja.
Todos los seres vivos que poseen un sistema nervioso central tienen la capacidad de sentir. Se puede observar que cuando un toro o una vaca son molestados por una insignificante mosca, tienen un impulso que es espantarla porque a los toros les molesta. El sufrimiento de los toros de lidia en las corridas de toros es incalculable por lo cual es considerado por muchos como tortura animal.
Las puyas, banderillas y espadas lesionan apófisis espinosas de vértebras, pueden lesionar la parte alta de las costillas, provocan hemorragias que pueden llegar al 18% del volumen sanguíneo del toro, pueden traspasar la pleura provocando neumotórax y como consecuencia insuficiencia respiratoria. Seccionan y lesionan ramas dorsales de nervios, en especial los que forman parte del plexo braquiocefálico que es el encargado de inervar los miembros anteriores. Esta es una de las razones de que los toros se caigan o cojeen. También se suele lesionar el pulmón o el bronquio derecho del toro lo que provocará el paso de sangre de pulmón a bronquio, de éste a la tráquea, de aquí al esófago y a las vías respiratorias altas y el toro morirá expulsando sangre por su boca (Zaldívar, 2008).
Según estudios realizados por la Academia Americana de Pediatría, los niños que son expuestos a la visualización de violencia, adoptarán con gran facilidad comportamientos violentos para resolver conflictos. Además puede llevar a una desensibilización emocional en relación a la violencia en la vida real. Esto puede disminuir la probabilidad de que alguien tome la iniciativa para proteger a víctimas de actos violentos (2009). Con estos resultados científicos podemos concluir que las corridas de toros afectan psicológicamente a los niños y algunos adultos que son espectadores de la tauromaquia. Esto tendría repercusiones negativas en la sociedad ya que se les enseña a los niños que la violencia es buena y es aplaudida. Por lo tanto se debe evitar que los niños sean expuestos a las corridas.
Finalmente, el argumento pro taurino más usado quizá es el que dice que se debe respetar los gustos y la libertad de los demás. Los fanáticos de las corridas dicen que si es que a los demás no les gusta las corridas de toros, pues que no las vean. Sin embargo debe existir tolerancia hacia las preferencias de entretenimiento de otras personas. Las corridas son un evento público así como el futbol o el cine y que cada uno hace la elección de ir o no ir según sus gustos. Además a mucha gente le gusta las corridas de toros.
La afición a la tauromaquia no es personal puesto que implica el sufrimiento y sometimiento de un animal. Del mismo modo, sería un tanto ilógico tratar a la violencia intrafamiliar como una cuestión personal y decir “si tu no quieres maltratar a tu mujer no lo hagas, pero déjame hacer a mi lo que yo quiera”. El toro de lidia es puesto en esta situación en contra de su voluntad, él no quiere ser atravesado por una espada y ser humillado ante una plaza llena de personas. Por lo tanto es su vida la que es irrespetada, así que no se puede exigir que se respeten los gustos que impliquen poner en riesgo la vida de terceros.
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