Rabito y el Hada de Cristal

[pic 1]

Presenta:

Rabito

y el

Hada de Cristal

Personajes en orden de aparición

ANGELITO,        Alejandro Gómez[pic 2]

ANGELITA,        Natalia Rojas         Hermanos mellizos

RABITO,  el perro, Nicolás Ibáñez  Mascota de los mellizos                                

EL HOMBRE GRIS, Nelson Celis[pic 3]

PAYASO TRISTE , Karen Agudelo            Secuaces del Hombre Gris 

PAYASO GORDINFLÓN, Natalia Soracipa

EL CARPINTERO DE SUEÑOS, André Torres

LA ABUELA COLORINCHE, Camila Ariza

EL HADA DE LA NAVIDAD, Luisa García

Asistente de Dirección         Cristhian Caína

Dirección General                César Morales

Una producción de la CNA- Compañía Nacional de las Artes 2016.

Escena I

Entra un grupo de juguetes y organiza el escenario.  Suena una música y después de un momento empiezan a cantar.

Canción “ La receta de la felicidad”

Si tú quieres ser feliz,

Solo tienes que cantar.

Si tú quieres ser feliz,

Solo tienes que cantar.

Hada : La felicidad es muy fácil de alcanzar, solo debes recordar esta canción que te voy a enseñar:

Sonríe sin parar

A todos por igual.

Se cordial con tu mayores

Y gentil con los menores

Da la mano al saludar

Y saluda al llegar

Y si llegas a salir

Te debes despedir

Abraza a mamá

Y también a tu papá

Que la magia de vivir

Está en compartir

Jugar, bailar

Pintar, soñar

No lo debes olvidar…

Que la magia de vivir

Está en compartir (bis)

Hada:  (al público) La historia que les voy a contar habla de la valentía que tienen ustedes los niños.  Del poder tan inmenso que está guardado en sus corazones.  Y de cómo, un solo niño puede cambiar destino del todo mundo…

(Aparece un niño vestido de gris, sentado en el escenario, llorando)

Niño Gris:  ¡Mentira! ¡Todo lo que estás diciendo es mentira!

Hada: ¿Quién habla?

Niño Gris:  Tú y tu fábrica de juguetes son una farsa.  

Hada: ¿Por qué  dices eso?Los juguetes te dan alegría.

Niño Gris: ¡Mentira!

Hada:  Te acompañan si te sientes solo. Dan color a tu vida.

Niño Gris: ¡Mentira! La vida es gris…el mundo es gris

Hada:  Dejame enseñarte…

Niño Gris: ¡Mentira! ¡Mentira! ¡Mentiraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! (Con el grito las luces relámpaguean. Remeda la canción que estaba cantando el hada) ¡La felicidad no existe!

Hada: ¡Pobrecillo, niño! ¿Por qué hay tanto odio en tu corazón? Déjame ayudarte.  ¿Qué tienes ahí?

Niño Gris: ¡Mira, eres tú! (Ríe. Tiene en su mano una muñeca con al forma del Hada de Cristal, sac a un Tayser y le da una descarga eléctrica al juguete. )

Hada: (Debilitándose)  ¿Qué haces?

Niño Gris: Nunca vas a volver a engañar a los niños con tus cuentos de hadas. (Activa de nuevo el tayser).  

Hada: (Más débil) No hagas eso…

Niño Gris: Yo me voy a encargar de hacer que los niños se olviden de ti y de tus tontos juguetes!!! (Le da otra descarga)

Hada: Mientras en el mundo haya niños jugando con sus juguetes, y creyendo en las hadas, nunca me voya a dar por vencida.

Niño Gris: JAJAJAJA ¡Di buenas noches, Hada!  (Entra Rabito y lo muerde)  ¡Suéltame costal de pulgas! (Rabito ladra.  El Hada se reincorpora)

Hada: ¡Rabito! (Haciendo magia con su varita) ¡Staticus! (El Niño Gris queda congelado) ¿por qué hay tanta tristeza en tus ojos? (Conmovida) ¿Qué te hicieron?

Niño Gris: (Tratando de engañar al Hada) ¡Ayúdame!

Hada: (Agitando su varita) ¡Dinamicus!

Niño Gris: (Desongelándose, agarrando a Rabito por el cuello y amenazándolo con el Tayser)  No te muevas Hada…o el costal de pulgas se va para el cielo de los perros.  

Hada: ¡Por favor, no le hagas daño a Rabito!

Si por favor, rabito sí.

Di buenas noches, costal de pulgas

Niño Gris: Esto no ha terminado aún.  Voy a cambiar el final de tu historia.  Nos volveremos a ver Hada de Cristal. Recoge el hada que está en el pisillo. EL perro le ladra (sale)

Rabito ladra hacia donde salió en Niño Gris

Hada: ¡Rabito! Déjalo ir.  Algo me dice que esta historia hasta ahora comienza.  ¡Nunca había visto tanto rencor y tanto odio en los ojos de un niño! Rabito, debes ir a donde los humanos, estar entre los niños, cuidar de ellos y de sus juguetes.  Por ningún motivo los niños pueden dejar de creer en la magia; sería el fin de nuestro mundo.

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