Realidad Nacional

Han leído Clases, Estado y nación en el Perú, de Julio Cotler? Si no, léanlo en este momento. Es un librazo. Y es un imprescindible para intentar entender qué ocurre en el Perú.

La lectura de Cotler no debería tomarse como objetiva, como desprejuiciada ni como absoluta. Es una lectura, entre muchas posibles, y una fuertemente influenciada por un vocabulario marxista. Y eso está bien. Porque más allá de la clara influencia y el vocabulario, el análisis de Cotler es bueno, pormenorizado, sumamente bien informado y profundamente revelador. Sus argumentos son contundentes, claramente articulados y respaldados por una cantidad enorme de datos y referencias históricas que en ningún momento abruman.

Lo trágico del libro, en realidad, es lo terriblemente vigente que sigue resultando. Cotler lo escribió en la época del velasquismo, y en efecto el libro es una lectura de la historia peruana desde la época de la colonia hasta el momento en que el gobierno militar da el golpe de estado al primer gobierno de Fernando Belaúnde. No se trata de una legitimación – de hecho, Cotler fue exiliado del país por el gobierno militar, y no le faltan denuncias y cuestionamientos a las políticas de “reforma desde arriba” del velasquismo – sino del desenvolvimiento progresivo de una serie de encadenamientos históricos y sociales que buscan explicar cuál es el sentido, el contexto y los antecedentes a partir de los cuales se da esa “ruptura” en el acontecer político peruano.

De nuevo, lo trágico es precisamente que Cotler retrocede hasta la colonia y empieza a encontrar desde las relaciones virreinales una serie de problemas sociales que siguen plenamente vigentes no solo en la época en la que se escribió el libro, sino hasta el día de hoy. Problemas que incluso uno puede empezar a mapear entre los candidatos de la campaña electoral actual, de modos que de maneras más o menos claras reflejan ideas y modos políticos propios de la república aristocrática, de la república oligárguica, del Perú decimonónico, etc. Da un poco de miedo darse cuenta de que a pesar de que mucho ha cambiado, muchas cosas fundamentales se mantienen imperturbadas, funcionando de la misma manera. Y que los mismos brotes y preocupaciones de antaño brotan y preocupan actualmente.

Quizás las ideas que presenta Cotler en este libro a estas alturas ya no sean nuevas, pero no por eso son menos fundamentales. A lo largo de varios siglos, el libro desentraña las complejas relaciones entre una multiplicidad de actores sociales que gruesamente pueden agruparse bajo tres líneas: una oligarguía regresiva, compuesta por terratenientes y grandes propietarios interesados en mantener el régimen de dominación de las clases populares para asegurar sus márgenes de ganancia; una burguesía o proto-burguesía medianamente progresista, convencida de que la ampliación de la inclusión social y la formalización

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