Reflexión: Los justos de Albert Camus
Enviado por Verónica Peña Labra • 9 de Marzo de 2017 • Ensayo • 2.006 Palabras (9 Páginas) • 533 Visitas
Reflexión: Los justos de Albert Camus
La obra teatral, Los Justos (1949), escrita por Albert Camus en Francia representa la revolución rusa de 1905, cuando algunos sectores del pueblo se rebelaron contra el gobierno monárquico para buscar la idea de justicia social. En el argumento se plantean dos bloques de la Rusia imperialista, el rebelde y el tirano.
El primero era conformado por terroristas revolucionarios y el segundo por el Duque Sergio, quien era responsable de la tiranía y opresión del pueblo. Durante esta época, las personas no podían aspirar a una mejor vida, sin importar el trabajo diario.
La miseria y represión de la clase baja genera el deseo de libertad e igualdad. Rusia era la cárcel de su propio pueblo. En el guión dramático, el sentimiento de amor es irónico porque, a pesar de ser el detonante de la revolución, se prefiere causar destrucción para luego crear. Por este motivo, surgen los terroristas. Su cometido era liberar el país de las cadenas y para esto, estaban dispuestos a usar la fuerza y aceptar daños colaterales.
Esto es un ejemplo de la filosofía del absurdo de Camus, pues no hay coherencia en aceptar herir lo protegido, en este caso el pueblo. El amor es un sentimiento que siempre maneja la reciprocidad y en la obra, éste podía no ser correspondido debido a la ausencia de comunicación entre civiles y terroristas. El derrocamiento o la muerte del noble podía no ser el deseo de todos.
La metáfora del espejo es un elemento notable en la obra y se desarrolla entre los personajes principales: Stepan y Yanek. Muestran los lados de una misma moneda pues uno conforma la parte noble y sentimental, mientras el otro representa la frialdad y parte racional de la Revolución.
El fin es el mismo pero las filosofías de vida y personalidades son opuestas, lo cual ocasiona disputas dentro del grupo sobre cómo proceder para lograr el objetivo. Stepan busca y piensa la justicia como lo más importante pero prefiere métodos egoístas y arrogantes. Yanek respeta y anhela el mismo concepto pero le importan más las virtudes del ser.
Camus, a pesar de no ser anarquista, muestra una completa conspiración a la autoridad en la obra Los Justos. Expresa lo obvio y lo oculto. Una revolución en un gobierno autoritario siempre se planeará en las sombras y su existencia será un murmuro, aún cuando sea lo más esperado y misterioso.
La metáfora del espejo en Los Justos de Albert Camus
Todo en la vida tiene su contraparte, luz y obscuridad, positivo y negativo, cálido o frío. En nuestro viaje conocemos tres tipos de personas; la afín a nosotros, el alma gemela y nuestro espejo. Este último es un objeto relacionado con el alma y con la capacidad de invertir nuestro ser interior, por tanto el encuentro con nuestro reflejo, mostrará nuestras carencias y, al mismo tiempo, significará un complemento.
En la obra dramática Los Justos de Albert Camus, se representa la revolución rusa de 1905, en la cual colisionan, dentro del movimiento, las filosofías de vida de los personajes principales: Yanek y Stepan. Ambos desarrollan un antagonismo a raíz de sus opuestas personalidades, ideologías y maneras de proceder, por tanto se hace alusión a un cristal que los refleja y contrasta. A través de los personajes antagónicos se desarrolla la metáfora del espejo.
Este objeto tiene la característica de reflejar lo contrario, pero durante este análisis se aplica a los personajes principales y sus filosofías de vida. La representación de la revolución se desarrolla desde estas dos perspectivas, el rebelde romántico y el racional.
Mientras Yanek valora y cree la vida lo más importante, Stepan piensa la justicia como esencial aunque requiera de daños colaterales. La trama de la historia y su desarrollo se verá influenciada por el antagonismo de ambos, el cual se genera por la incomprensión al pensamiento y manera de ser del otro.
La ideología de Yanek se rige por la importancia y amor a la vida. En su primer atentado terrorista, debía matar al Duque Sergio y liberar Rusia pero fracasó al negarse matar a los sobrinos. Para Yanek la existencia de un inocente es más importante que el objetivo de la rebelión, lo cual hace alusión al primer factor de la filosofía de vida: “El fin no justifica los medios”.
Por otra parte, esta decisión de claudicar a la misión fue la primera disputa dentro del grupo revolucionario. Stepan juzgaba su decisión como cobardía. Su filosofía se rige por: “El sacrificio por un bien mayor.” La vida de niños nobles, en este caso, no podían compararse con la salvación de todo el pueblo ruso al morir el Duque.
Por tanto, el fracaso del asesinato del Duque es imperdonable para Stepan y una traición al movimiento: “No tengo bastante corazón para esas tonterías. El día en que nos decidamos a olvidar a los niños, seremos los amos del mundo y la revolución triunfará”. [1] La insensibilidad del revolucionario muestra su lógica, pues su frialdad es necesaria para enfocar el objetivo y no desviarlo con factores externos.
Pienso la lógica de Stepan no estaba totalmente errónea, porque para lograr un cambio tan drástico en un sistema se necesita de un factor que ocasione un gran impacto y a veces no se puede evitar el daño de inocentes. El derrocamiento del Duque solo se lograría con fuerza y su muerte.
Así mismo, los revolucionarios eran terroristas y por definición, infligir terror en la población era inevitable aunque hubiera otro propósito. No obstante, causa conflicto con el personaje heroico de Yanek pues, su amor por la vida era más grande.
“(…)Lo llamamos también el Poeta (…) Dice que la poesía es revolucionaria.”[2] Este diálogo es de Annenkov (líder del grupo) cuando hace mención de Yanek a Stepan, lo cual puede interpretarse como si el revolucionario fuera diplomático y pacifista y, por esto, diera tanta importancia a las palabras, en este caso referidas como poesía.
Esta creencia en el poder de la palabra, hace a Yanek un personaje romántico. Mantiene su idea de auto-sacrifico pero también su naturaleza pacífica. Él no aceptará la idea de sacrificar a civiles e inocentes por la causa: “(…) hará de mi un asesino cuando trato de ser un justiciero.”
...