VisiCalc

VisiCalc fue el 1° software comercial para ordenadores personales que prometía hojas de cálculo. Lanzado para el Apple® II, su impacto en la industria fue enorme.

El gran objetivo de los creadores era llegar al público general y, por supuesto, a las empresas. Uno de los primeros ordenadores comerciales en tener gran impacto en el hogar y en las industrias fue el Apple II; un triunfo que se debió a su precio, la intensa campaña de marketing que se llevó y, por supuesto, al software que se realizó para este ordenador personal.

Con el lanzamiento del Apple® II además llegó al comercio un software clave en las empresas: las hojas de cálculo.

El software fue un pilar clave para el triunfo del Apple® II, además de lanzarse juegos míticos como la 1ª entrega de “¿Dónde se esconde Carmen Sandiego?”, el 2° ordenador de Apple® además realizó su incursión en el planeta de las industrias gracias a un software que, hoy en día, usan millones de visitantes de todo el planeta (tanto en el hogar como en las industrias o en el sector educativo): las hojas de cálculo.

VisiCalc fue el nombre que aceptó este software de hojas de cálculo, una utilidad cuyo código no ocupaba más que 27,52 KB y que se transformaría en el 1° software comercial de hojas de cálculo de la historia. Si hoy en día pasas horas delante de Microsoft® Excel o de Libre office Calc, puede que no sepas que el origen de este tipo de programas se remonta al año 1979, año en el que se lanzó VisiCalc al mercado.

VisiCalc: Visible Calculator

VisiCalc significa Visible Calculator (calculadora visible), fue el nombre que aceptó esta utilidad que ostenta el honor de haber llevado al Apple® II en el planeta empresarial.

El encargado de la idea fue Dan Bricklin, un especialista formado en el MIT y en la Universidad Harvard en gestión de empresas, que tomó como referencia las programas de cálculo basadas en filas y columnas que utilizaban los mainframes de las enormes industrias que, a su vez, se basaban en los ejemplos financieros basados en tablas de cálculo que se enseñaban en la universidad. De hecho, el propio Bricklin siempre reconoció que, tras su paso por Harvard, contemplo lo tedioso que eran los cálculos financieros basados tablas y como su profesor tenía que regresar a repetirlos si cometía un yerro o reajustaba uno de los parámetros que usaba.

Por aquel entonces, los programas de cálculo financiero pese a que utilizaban tablas, realizaban las operaciones de manera secuencial. Por tanto, si alguien realizaba un cambio, era necesario repetir todos los pasos desde el comienzo porque los cambios no era interactivos. Además, este tipo de herramientas estaban orientadas a los mainframes empresariales; es decir, no había nada para ordenadores personales que permitiese laborar con este tipo de cálculos en home o en pequeñas empresas.

«VisiCalc se realizó en un plazo de 2 períodos entre 1978 y 1979. Su valor de venta fue de 100 dólares.»

Viendo una oportunidad en este segmento, Bricklin pensó que era factible crear un software que permitiese efectuar cálculos con tablas de manera interactiva en máquinas personales. La idea era

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