Cristian U en Seres Libres

Cristian U en Seres Libres

Si miras para atrás, ¿cuáles fueron los momentos más oscuros tuyos?

Y... el más oscuro fue en la niñez

¿Porque?

Y porque yo en la niñez pase por todas las adicciones, drogas, robos, ludopatía...

¿Ludopatía?

Si si, yo desde los 18 que pude entrar a un casino hasta los 22-23 años fue una tortura, quede en la calle, sin comida, en la calle no fue literal pero tenía una casa que alquilaba, pero había vendido todos los muebles.

¿Porque no podías parar de jugar?

No podía parar de jugar, era vender el televisor… imagínate esto, un día en un bingo acá muy cercano al canal, para lado de provincia, yo tenía un auto, era el momento en el que la gente traía cosas de Paraguay y costaban, no sé, 3 veces más barato, y le había puesto llantas, estéreo, sonido, no sabías como lo había dejado, esto año 91-92 fue. Esto fue una mañana que la arme. Al mediodía salgo o sea era pendejo, los vidrios abajo, la música tun tun, viste. Y a la noche madrugada el auto estaba desarmado en la cochera del bingo, vine con otro amigo, la desarme toda y vendí todo a mitad de precio.

¿Y que tenía esa adicción al juego, la ludopatía, que tenía, que era?

Es la adrenalina de la bola que va girando y que entra el 0 en el 32 y se te va al lado y decís “me la está por tirar en la próxima”, esa es una. La otra es todo lo que padecía, todas las ganas de querer ponerle al 32, 10 mil dólares y que salga y decir bueno me acomode los huesos al cuerpo. Son un montón de carencias que traemos el juego, por ejemplo a mí me paso en su momento, me puse en pareja con una persona que estuve muchísimos años y era una persona casada y estaba casada con una persona de mucho dinero y yo era un raja que era el paseador de perros de acá de la boca acá cerca y no tenía un mango o sea era el atorrante que vivía el día al día, quilombero, todo lo de un pibe atorrante de la boca, yo tenía un Renault 9, claro la piba acostumbrada a andar en BMW, camioneta, ósea me daba como vergüenza, ¿que hice? Se lo vendí al Poli, un amigo de mi infancia de la boca, el auto no se valía 10 mil pesos que eran 10 mil dólares y se lo vendí en 6, me lo compro al instante. De esas 6 lucas las agarre me fui de acá al casino y las tire en una bola colorado mayor, ¿dónde me entra? En el negro el 2. Pero vos me decís pero ¿porque hiciste eso? Porque la idea era con mil pesos, mil dólares, agarrar uno de esos y transformarlo en 36, esa es la idea del que juega, si, transformarlo en 36 ¿con 36 que hacia el tipo? Se iba a comprar un 206, en ese momento que había salido del año y era el autito del momento y era pasarla a buscar a la chica en el 206 y llevármela a mar del plata cosa que no había ido casi nunca, una sola vez creo, entonces son todos esos sueños frustrados que los vez lejanos, que dependes del juego, o que depende de entrar en otra adicción para desaparecer un rato del mundo real en el que vivimos y…

¿Y esa otra adicción, por ejemplo decías merca?

La merca vos sabes que merca no, por ahí otras cosas, marihuana, éxtasis. Nunca nunca pase por la merca, siempre le tuve como miedo, ni siquiera, mira que vos sabes, en la calle el constante “proba vas a ver que no te hace nada, vas a ver…” le tuve siempre miedo, por suerte, tuve un papa, tuve porque falleció hace un par de meses, un papa formidable o se aun laburante sin un mango pero formidable de acá (señala la cabeza) y de acá (señala al corazón) viste. Y yo a los 12 años con gente justo de acá a la vuelta, yo tenía 12 años, ellos eran gente grande. Mi viejo se enteró que yo con esta gente andaba haciendo maldades…

¿Maldades qué?

Maldades, de, eran todos chorros, iban a  chorear y yo iba con ellos, les llevaba las armas, el regalado de la vida cuando en ese momento se usaban los equipos de gimnasios 2 chicagos bulls, de todo lo que es la NBA, claro y mi me usaban como el pichón, claro boludo si a mí me agarraban no me pasaba nada, y yo era el pepito el pistolero iba de acá, claro no sabiendo que me iban a meter dos cachetazos en cualquier momento y me iban a dejar llorando en piso

¿Y tú viejo?

Y mi viejo un laburante que laburaba de pero te juro, desde las 5 de la mañana hasta la noche y me hizo lo más sagrado y lo más potente que te puede hacer un padre, que no fue cagarme a palo, eh recibido mil golpes pero por nada por sabandija que tampoco es aconsejable pero un  día me agarra, se entera mi viejo, me agarra  y me dice, mi viejo era electricista instalador de aire acondicionado, y un día me agarra y me dice “veni” me sienta me dice “ che, así que te convertiste en un mafioso” así tal cual, le digo “no, ¿porque?”, me dice “no, me contaron que andas con una gente de San Telmo, que andas amenazando gente, que entras a negocios a hacerte el malo” y era todo real viste me quede blanco dije ya está me explota la cara viste y me quede así duro, y me dice “no te voy a hacer nada, lo único que te voy a decir, mira (todas la manos lastimadas tenía mi viejo) todo esto lo hago para que a vos no te falte ni el colegio, ni la bici que te regale la vez pasada que la saque en 50 cuotas, que no te falte la comida, y lo único que haces es cagarte en estas manos, si llegas a caer preso, papa no te va a venir a buscar, te vas a quedar ahí, porque me da vergüenza entrar a la comisaria, porque yo entro a la comisaria las 24 horas, yo paso por la comisaria y me saludan todos porque yo les arreglo el aire acondicionado, les arreglo la electricidad, acá me quieren todos y yo trate de darte lo mejor y lo único que estás haciendo es ensuciar tu vida y la mía” me dice así,  “si de acá para adelante queres ser un hombre honrado como yo, papa te sigue bancando, si no, anda tranquilo”

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