El concilio plenario en Venezuela

República Bolivariana de Venezuela.

Ministerio del Poder Popular para la Educación.

U.E: Padre Félix de Vegamián.

Materia: Biología.

El concilio plenario en Venezuela. [pic 1]

             Prof:                                                                              Realizado por:

 Robinson Morales.                                                             Ronaldo Urdaneta.

                                           San José, 14/06/12.

¿Qué es un concilio?  
Un concilio es, fundamentalmente, una reunión de obispos –con participación de los otros sectores del Pueblo de Dios- , con la finalidad de ejercer conjuntamente la tarea que les corresponde en el campo de la enseñanza, de la santificación y del gobierno pastoral. Expresa la naturaleza corporativa o “colegial” del ministerio episcopal en la Iglesia. Así como Cristo no instituyó a los Apóstoles separadamente al frente de la Iglesia, sino que constituyó un cuerpo o colegio apostólico, con Pedro a la cabeza, de igual manera los obispos (sus sucesores) forman lo que se llama el Colegio Episcopal, con el Papa a la cabeza.

El Concilio Plenario de Venezuela nos ofrece una magnífica oportunidad para que realicemos una profunda conversión y una renovación personal en un clima de oración siempre más intensa y de solidaria acogida del prójimo, sobre todo del más necesitado. Este Concilio nos ayudará a ubicarnos en los siguientes objetivos: anuncio misionero, catequesis, liturgia y oración, comunidad visible, promoción humana y diálogo para la comunión y participación. En este sentido el Concilio Plenario de Venezuela es tarea de toda la Iglesia y todos de una u otra manera, deben sentirse implicados y orar fervientemente por el feliz desarrollo del mismo, hacerse solidario y aportar sugerencias, responder encuestas y estar presentes en aquellos momentos o actos celebrativos que signifiquen compromiso de fe y testimonio de vida cristiana. Nuestra Iglesia reflexiona sobre sí misma, se pregunta por su ser y que hacer, por su dónde está y hacia dónde va, para responder a los grandes retos de la nueva evangelización y la relación entre fe y cultura. Emprendemos un Concilio porque somos un país que se confiesa históricamente católico en su inmensa mayoría, pero con amplios ribetes de deshumanización por la extensión de la pobreza-miseria, por el deterioro ético debido a la corrupción a todo nivel y a la desorientación y relativismo moral, con el doloroso divorcio entre fe y vida.

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