Noche y niebla

POR: Zarith Sánchez

DOCUMENAL: Noche y niebla de Alain Resnais, 1955

Escena: El fin de esta fila,

Tiempo: 22:25

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“Foto tomada antes de una exterminación”

El filósofo Aristóteles afirmaba que “la esperanza es el sueño del hombre despierto, como una visión utópica de algo en un futuro cercano, pero, sobre todo, de tu capacidad y determinación para alcanzar tus propios sueños e ilusiones”

Los inocentes quizás sospechaban de donde salía aquella sombra, que les daño su sueño de una vida tranquila y en paz, mientras la sombra les arrebataba sus sueños y cada vez eran menos, ataban con sus temerosas sogas a los más inocentes del asunto, les lleno de temor sus corazones, mientras los más pensantes no decían nada, callaban su dolor y desesperación

En una fila de inocencia, donde hermanos y amigos llegaban a su fin después de una vida de sufrimiento, de malos tratos y humillaciones, con la esperanza de algún día tener satisfacción de una nueva vida, sin sufrimientos, pero ya no había espacio para esperanza solo el frio de su desnudes, sus esperanzas ya estaban agotadas, al conocer que poco a poco quedaban menos de su pueblo, después del abrazo de la muerte cerraban sus ojos y dormían hasta un infinito amanecer, donde comprendían un viaje en el que jamás los volverían a ver, muchos esperaban con ansias este momento, quizás para llegar a algún lugar sin sufrimiento ni discordias, donde por fin tendrían la libertad con sus hermanos y amigos inocentes del suceso

Saber que en otras circunstancias podrían haber estado viviendo de mejor manera y sin ningún sufrimiento, soñando que sus pequeños un día podrían estar jugando por las calles de su pueblo, riendo y viviendo en el mundo de los niños felices, los adultos y ancianos contando sus historias a la hora de las comidas, en grandes grupos, celebrando las grandes festividades de su pueblo, pero por ahora solo estaba el mundo gris, donde los más pequeños corrían por diferentes lados, algunos sin terminar de comprender que estaba pasando, y al final terminaban siempre observando lo mismo, tiendas, pero en lugares diferentes donde se burlaban de su desnudez, algunos eran maltratados o abusados, siempre mirando soldados de diferentes caras con una misma vestimenta.

Al acercarse a su fin iban juntos como si tuvieran cadenas, aunque sus muñecas estaban desnudas, los acercaban cada vez más al lugar de su inocente esperanza y viaje infinito, si quizás hubieran sabido sobre su meta catastrófica hubieran escapado, aunque sus ganas de hacerlo eran bajas, y más aun viendo como muchos ya lo habían intentado, teniendo un fin muy doloroso en frente de todos, para que los demás no lo hicieran, y al final llego el momento de su fin, con sus sueños destrozado e ilusiones hechas cenizas, en tan solo unos pequeños sonidos, que anunciaban que ya todo había acabado para ellos.

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