ANALISIS LIBRO CIUDADANOS DEL MUNDO

CIUDADANOS DEL MUNDO HACIA UN TEORIA DE LA CIUDADANIA

Integrantes:

Iván Leonardo Amando Jiménez

Daniela Vega Sánchez

Yeison Alexander Barón Sánchez

Francy Johana Aponte Moreno

Astrid Sorangel Plazas Ovalle

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Universidad Santo Tomás – Tunja

Especialización En Derecho Administrativo

2022

Con base en la introducción del libro: “Ciudadanos de mundo” responda a la pregunta por la justicia y la equidad a partir de los siguientes cuestionamientos:

1.        Identifique los valores fundantes que la autora quiere proponer en el texto

2.        ¿Qué lugar ocupa la ley y el castigo en el proceso de humanización?

3.        Para la autora, ¿qué respuesta es necesaria para lograr una conducta humanizadora?

En tal sentido, construya un razonamiento crítico en el cual justifique el lugar que ocupa la ley en la configuración del ser humano como fin y no como medio, de modo que se pueda explicar el papel que este mismo ser humano cumple como interlocutor válido en la solución a las problemáticas que afectan su entorno.

DESARROLLO

1. 

• El Humanismo. no se basa en la imposición de leyes humanas o divinas, ni tampoco en el castigo, sino en la interiorización de ciertos deberes morales que la persona asuma por razón pura y no por obligación. Una vez surta efecto este proceso,  se pueden implementar normas, discutidas y debatidas en sociedad. La persona debe estar convencida de que esas normas serian aquellas, que por lógica humanista, establecería o instauraría, para desarrollar su conducta.
• En la Introducción asienta la tesis central de que la ciudadanía representa el punto de unión entre la razón sentiente de cualquier persona y las leyes y los valores, es decir, entre nuestros más profundos sentimientos racionales: el de pertenencia a una comunidad y el de justicia en esa misma comunidad. La posición desde la cual la autora desarrolla su teoría es desde la ética, para ella, valores como la justicia, la igualdad y la felicidad están intrínsecos en la vida del ser humano, los cuales se deberán reflejar en el sistema político actual: la democracia.

2.

• La ley y el castigo desde la perspectiva de la autora tiene una correlación en cuanto al desarrollo de la humanización de las personas toda vez que se da una asimilación de la ley por medio de la repetición de los conceptos que se consideran correctos, brindando de esta manera una asimilación de ellos y usando al castigo el cual sirve para atemorizar y someter a la persona que está siendo objeto de “humanización” aclarando que dicho precepto no se puede considerar como correcto ya que es el simple adoctrinamiento de las personas mas no la asimilación propia proceso en el cual si se podría considerar humanización.
• El castigo, presentado como amenaza a los individuos, ya sea con la prisión, la vergüenza social o entre países con sanciones económicas, no sirve para forjar una conducta humanizadora, ya que la forma indicada se basa en la razón sentiente de los seres humanos, es por ello que el mensaje que se le debe dar a la comunidad, debe fundarse en la esperanza, más allá que en el terror, el miedo o la represión.

3.

• La autora sostiene que existe progreso en el modo de percibir y desarrollar los valores de las personas y en la posibilidad de universalizarlos, es decir, de visualizarlos como universalmente humanizadores, dando como resultado una conducta personal que los seres humanos somos capaces de asumir el punto de vista de la universalidad, es decir, de estar dispuestos a exigirlos para todos las personas. Por su parte, una respuesta necesaria se da en que el trabajo sigue siendo el principal medio de ingreso y de sustento ciudadano, uno de los cimientos de la identidad personal, una conducta que no sustituye la participación social y política y una forma de educación y de humanización.
• Para lograr una conducta humanizadora, hay que propender por darle valor a los sentimientos y opiniones del ser humano, ya que como señalan los filósofos, cada persona es la unión de deseo, intelecto, razón y sentimiento. Nunca una pauta humanizadora puede consistir en la represión o repetición de una norma, ya que esto tarde o temprano dejará tener efecto, más bien hay que armonizar los sentimientos profundos y racionales del ser humano, basados en la pertenencia a la comunidad y en la justicia de esa misma comunidad. El proceso de socialización, comprende reconocer que el mensaje de esperanza es el único que puede llevar a que la persona perciba para sí como cierta una pauta social que le permita poder vivir en armonía con los demás.

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