Act. 15. Ensayo reflexivo "Fortaleciendo mi liderazgo"

Act. 15. Ensayo reflexivo "Fortaleciendo mi liderazgo"

Empezaré señalando que a partir de mi primera definición de liderazgo, conforme he ido avanzando en el curso, descubro cada vez más detalles que fortalecen el aprendizaje sobre la labor de un líder.

Menciono que el liderazgo efectivo conlleva un conjunto de habilidades, conocimientos y capacidades que dirigen y encauzan a obtener una escuela efectiva, no solo se enfocan a trabajar uno solo, sino que a través de diversas acciones logran implementar el liderazgo distribuido, el pedagógico y el instruccional; propiciando la colaboración activa para el logro de objetivos y con miras hacia una mejora constante, no solo en la forma o estructura, sino que también en el fondo, es decir, en la organización y formas de interacción necesarias y responsables para lograr que todos los alumnos aprendan.

Es bien sabido que existen diversos tipos de líderes y por ende de liderazgos, sin embargo, he llegado a la reflexión de que no cualquiera puede denominarse líder por el simple hecho de sentarse detrás de un escritorio para guiar y organizar el trabajo de una institución, ya que un líder y una escuela exitosa muestran con evidencias claras un avance significativo porque no se limitan al cumplimiento básico, sino que se esfuerzan por ser siempre activos e innovadores, con el propósito de obtener en la mejor medida lo que el plan de estudios 2011 y el artículo tercero de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos señala, con el perfil de egreso de los educandos y con el logro de una educación de calidad que solo puede ser posible a partir de un arduo esfuerzo, dedicación y entrega.

El término de liderazgo escolar suele utilizarse de manera análoga con el de administración o gestión escolar. Sin embargo, la gran diferencia se encuentra  en la frase citada frecuentemente: “Los gerentes hacen las cosas bien, en tanto que los líderes hacen lo correcto”, ante ello, cabe mencionar que un líder educativo exitoso cumple con los requerimientos gubernamentales y da seguimiento positivo a las necesidades morales y de formación de los maestros, del personal de apoyo, pero por encima de todo de los alumnos; aunque es difícil encontrar escuelas exitosas por el gran número de evaluaciones estandarizadas que se aplican y que muestran resultados poco favorables, si es posible encontrar directivos exitosos que manifiestan empatía, positivismo, optimismo, inteligencia, entusiasmo, capacidad de motivar, convocar, gestionar, incentivar, de ser ejemplo, de dirigir y ser seguido, que luchan por conseguir mejores aprendizajes a partir de una labor comprometida y responsable de su gestión educativa, entre otras que no se adquieren de la noche a la mañana y por ello, merecen un reconocimiento superior.

Sin duda alguna, la presencia de líderes es indispensable porque los seres humanos necesitamos de guías o modelos con gran capacidad para el seguimiento de proyectos y la consecución de metas. Para ello, es necesaria una formación orientada a desarrollar una serie de competencias  ya estipuladas, que son:

1. Comprender la necesidad de la innovación y los cambios institucionales orientados hacia la consecución de las mejores respuestas a las necesidades de los estudiantes y de la escuela del país.

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