Análisis Que Política Anna Harendt

¿Qué es política?, Hannah Arendt.

Reseña a la Introducción realizada por Fina Birulés.

Universidad de Barcelona, Cataluña.

Por Rafael Trujillo Ruiz

Fina Birulés es académica e investigadora que ha enfocado su trabajo en la obra de Hannah Arendt, sus investigaciones acerca de la autora del libro ¿Qué es política?, La condición humana, La vida del espíritu, entre otras obras de relevancia fundamental en el ámbito de las ciencias sociales, le han dado una posición de renombre en cuanto a sus investigaciones respecto de Arendt, a través de perspectivas históricas, políticas e incluso filosofía feminista, Fina es quién nos otorga una cartografía resumida en la introducción que antecede a una de las obras más importantes de Arendt, ¿Qué es política?.

Hannah Arendt es reconocida  en el mundo entero por su trabajo en temáticas de carácter social desde diferentes ópticas en las que desarrolló su trabajo, generando interés en filósofos, filólogos, sociólogos, politólogos e  historiadores, además del reconocimiento en diferentes universidades e institutos del mundo entero, los conceptos de política que Arendt incorpora en el siglo pasado parecieran tener una extraordinaria vigencia en los tiempos que vivimos hoy en día, su visión a raíz de las experiencias propias de sus circunstancias, dan cuenta del marco referencial en el que se sitúa su propia existencia, primera y segunda guerra mundial, el nacional socialismo liderado por Hitler, gobiernos europeos de carácter  fascistas, la guerra de Vietnam, Guerra Fría, regímenes totalitarios inducen a Arendt a cuestionarse el contexto social propio como testigo en primera persona de estos sistemas de organización social.

Es así como la autora integra en sus obras junto con reflexiones existenciales y profundas, específicamente en “¿Qué es política?”, la fenomenología presente en la sociedad y la  búsqueda  de conceptos que den respuesta ontológicamente a la pregunta presentada por la autora en el título de la obra, dando origen a una especie de nuevo mapa, nuevo porque dejando de lado las tradiciones impuestas en la época, busca orientarnos paso a paso, desde los fundamentos de la concepción del ser, su individualidad y libertad, respecto a las interacciones con sus pares, para concebir y desarrollar las bases contemporáneas del planteamiento del nuevo constructo social.

Fina Birulés con una perspectiva aguda respecto a lo esencial del problema planteado por Arendt, expone en el texto, “Como afirma Arendt, preguntas tan elementales y directas como «¿Qué es la Política?» pueden surgir sólo si ya no hay ni son válidas las respuestas formuladas por la tradición. Y hay que formularlas de nuevo en un momento, tras las experiencias políticas del segundo cuarto del siglo XX, en que han estallado nuestras viejas categorías de comprensión”, en este sentido, la lectura del pasado histórico, particular y propia de Arendt, se desentiende de la cosmovisión político social de la época, desentendimiento que le permite desentenderse de las estéticas socio-políticas de la época, cuestionando que la filosofía occidental ha hablado del hombre pero no de la pluralidad.

El concepto de pensar, proceso racional que para Arendt tenía un carácter de acción, define al “lenguaje como un “pensar congelado” el cual debe ser descongelado a modo de encontrar el sentido” (1), este acto de descongelar, sugiere praxis, acción e independencia de las retóricas del lenguaje en un determinado tiempo y espacio, es interesante como el concepto de acción va adquiriendo solidez en el transcurso del texto, concepto que subyace a lo que expone desde la base ontológica del planteamiento acerca de lo que es la política, planteando incluso la acción como una dimensión del ser , exponiendo en esto su temprana, pero no por ello definitiva, influencia de autores como Heidegger, contrastando la acción con otras dimensiones de la condición humana, la labor y el trabajo, luego esta reflexión se apoya en sus investigaciones etimológicas del lenguaje, concepto fundamental en el marco de su trabajo social, este concepto se acerca a la ruptura que Rancière expone respecto del  concepto definido por Marx como “Metapolítica”, el “supuesto por el cual la clase obrera, incapacitada de actuar por sí misma, no puede desarrollarse si no es con la ayuda de una verdad inmanente que viene del exterior”(2).

Las definiciones para los conceptos con que se contrasta la acción, son definidas en el texto mismo, la labor se vincula a la necesidad y al consumir, no dejar nada tras de sí, una necesidad satisfecha que da lugar a un bucle del existir y está estrechamente relacionado con la naturaleza,

1. Arendt, Hannah, The Life of the Mind, Harcourt, Brace Jovanovich, Nueva

York 1977 [trad. cast, en Centro de Estudios Constitucionales, Madrid 1984, pág. 202].

1. The political in art. A contribution from the theory of Jacques Rancière, Verónica Capasso.

es común a todos los seres, lo cual hace que éste sea no visibilizado en esta labor adquiriendo de

esta forma un carácter apolítico, “la labor es el opio del pueblo que Marx creyó que era la religión” (3) expone Arendt en otro texto, lo cual explica el concepto que surge de la labor humana, el ser como animal laborans, anulando la identidad y dando lugar a la uniformidad, resulta paradójico observar  como el sistema socio - político actual, se nutre de esta dimensión del ser, tomando la uniformidad y la necesidad en función de establecer paradigmas que inviten al consumo. La dimensión del trabajo es vinculada por otra parte al producir objetos, a partir de la naturaleza por cierto, la cual debe necesariamente ser sometida por el humano, aparece así el homo faber, ser dominante que se convierte en amo de esta y la somete con violencia con el fin de lograr la fabricación del objeto, estas definiciones sugieren el consumo como el motor en si mismo de estos procesos, desde los cuales,  una vez más, el sistema neoliberal imperante opera ponderando el consumo como un fin en si mismo,  como el  resultado se obtiene lo que el consumo puede ofrecer, una ilusión de estabilidad en función de los objetos que se puedan obtener a través del trabajo y la producción.

La acción por otra parte, da origen a un espacio habitable, este concepto de habitable es inherente al espacio, siendo imposible no relacionarlo al espacio – tiempo definido en la relatividad especial por la física moderna, el entorno donde es posible la vida en su sentido no biológico, sino perceptivo, la bios, esta dualidad espacio – tiempo, lo que conocemos como mundo,  da origen a las relaciones con otros seres, relaciones que afirman nuestra propia existencia, en el marco del bios solo podemos percibir en la medida que somos percibidos, “no sólo estamos en el mundo, sino que formamos parte de él” (4), esto sitúa a los seres dentro de un contexto del cual forman parte y son parte, lo que implica que existe una relación entre éstos que esta vinculada la percepción común del espacio tiempo, esta percepción común es solamente experimentable mediante el lenguaje, es este, el que cohesiona dos puntos de vista entre dos seres que poseen percepciones particulares,  es aquí que nace la acción política, comunicándonos es la única forma de comprender, desde la  particular percepción individual,  como es el mundo, es pues lo que une estas percepciones, lo que esta entre  estas percepciones el mundo mismo, acción política es por lo tanto, el espacio tiempo compartido por los seres que lo componen.

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