Cuadro comparativo de dimensiones humanas

DIMENSIONES

EXPERIENCIA DE VIDA

ACTITUDES Y SENTIMIENTOS EXPERIMENTADOS EN DICHO ACONTECIMIENTO

CAMBIOS GENERADOS A PARTIR DE ESTA EXPERIENCIA.

Dimensión Ética

En el año 2018, a la edad de 16 años, estaba cursando grado décimo en el colegio Alonso de Olalla, por lo cual, debía realizar labor social en contra-jornada. En cierta ocasión, nos dividieron las sedes y grupos con los que nos desempeñaríamos. A mí, me correspondió trabajar con dos compañeros, Alexander y Cristian, en la biblioteca municipal, luego nos cambiarían de sitio para seguir laborando.                         Nuestro compromiso era organizar libros, enciclopedias por orden alfabético y clasificarlos según las temáticas, ser asistentes de la bibliotecaria, y ayudar en las dudas a los usuarios.

Realizábamos nuestra labor social de lunes a viernes de 02:00 pm a 06:00 pm.

Todos trabajábamos en equipo, la confianza y cada día se fortalecía más.

Un día, al terminar la jornada de labor social, Alexander y yo nos fuimos juntos hasta el parque, pues allí, cada uno tomaba su rumbo. Mientras caminábamos, Alexander encendió un cigarrillo, a lo que le pregunté la razón por la que lo hacia. Él me respondió lo siguiente:

• Yo fumo porque me hace olvidar los problemas, me relaja y me ayuda a estar activo.

Yo solo asentí, para demostrar que había entendido. Luego le     volví a hacer otra pregunta.

• ¿Pero solo ha probado el cigarrillo o algo más?

Durante unos minutos, él se quedó callado, y me preguntó la razón por la que lo había dicho.

A causa de que la confianza ya prevalecía, decidí ser sincera con él .

• Antier usted llegó con los ojos rojos, yo tengo un hermano que pasó por el camino de las drogas  y sus ojos eran de ese mismo color cuando se drogaba.
• Le voy a decir la verdad-me dijo- pero no le vaya decir a nadie. Yo si uso la marihuana, pero es porque en mi casa no me tratan bien, me juzgan, mi mamá engaña a mi paá, y mi papá se embriaga.

Yo em quede atónita, a mí me pasaba algo no tan similar, en mi hogar no había cariño, mis padres discutían demasiado, mi hermano era drogadicto y me maltrataban.

• Lo siento mucho- le dije- es un caos total, pero creo que la droga no es la solución.
• Diana- me contestó- si yo busco ayuda a alguien me van a llevar al bienestar, ya me falta poco para salir de estudiar, dentro de dos meses cumplo 18 años, me quiero ir de la casa, es lo único que anhelo.

Cuando llegamos al parque le dije que nos sentáramos en la rotonda y habláramos un poco más.

Mientras él me contaba su situación también le conté mis problemas, la tristeza me evadió por completo, entonces él me dijo que quería mostrarme algo, así que acepte ir al lugar que me indicó.

Al llegar, abrió su mochila y sacó una pipa, en la que llevaba un poco de droga. Lo pasé por desapercibido, ambos estábamos depresivos.

Ya eran las siete así que debía irme, estaba además un poco asustada pues el me ofreció probar la marihuana.

Le dije que estaba indecisa, tenía miedo a convertirme en drogadicta, pero él me respondió que solo sería por ese día.

Sinceramente, yo no podía, había tenido dificultades pero a pesar de eso, mis padres, trabajaban duramente por mis hermanos y yo, así que le dije:

• Alex, discúlpeme por lo que voy a decir pero sigo creyendo que no es al solución, es un vicio malo, solo es temporal, no soluciona los problemas, gracias pero no, y si no le molesta podemos buscar a alguien que nos ayude, una psicóloga, o una persona de confianza.

Su reacción me causó impacto, pues fue agresivo y ofensivo, me dijo que nadie lo apoyaba, que prefería seguir solo en la vida, y se fue diciendo palabras grotescas.

Decidí escoger esta situación porque una de sus características es la toma de decisiones, el hecho de que yo no aceptara, fue un gran paso, debido a que la droga es un negocio donde tu vida termina en una cuerda floja de la vida o la muerte.

• Actitudes: me pareció curioso saber las razones por las que realizaba estos actos, fui paciente y bondadosa al escuchar su situación. Tuve la compasión de ayudarlo, aunque él no lo permitiera.
• Sentimientos: sentí tristeza, de nuestras situaciones, indecisión para elegir, luego valentía para decidir y sobre todo, sentí empatía por sus dificultades.

A partir de esta situación aprendí, que la razón por la que estoy hoy en día, en gracias a las decisiones que he tomado durante mi vida. La droga es un negocio que se enriquece a costa de tu vida, es un juego que te lleva a la muerte y a tomar malas decisiones si consideras que es la solución. Me ayudó a enfocarme en otras alternativas de solución a mis problemas, asistí a una psicóloga de mi colegio, donde le pedí consejos, y así tener la astucia de elegir mejor lo bueno y lo malo para mí.

Dimensión Espiritual

En el año 2015, a la edad de 13 años, cuando comenzaba mi pre-adolescencia, me deje llevar por rumbos incoherentes que estuvieron a puntos de destruirme. Al iniciar clases, grado séptimo, distinguí compañeras nuevas, ellas, tenían una actitud arrolladora, ofensiva y pesada, sin embargo, me quise dar la oportunidad de conocerlas un poco. Yo siempre asistía a misa, pertenezco a la iglesia católica porque así me lo inculcaron mis padres, y a mi me gustaba hacer parte de esta. Ellas hacían parte de otras comunidades religiosas, por lo que al contarles de donde venía, se burlaron en mi cara, incentivando el bullying.

Yo no soportaba que me molestaran, pero nunca le dije nada a mi mamá, sino solamente empecé a convertirme en la persona que ellas querían que fuera. Mi actitud de niña de casa, juiciosa, responsable y educada, había sido reemplazada por unas actitudes grotescas, insoportables e irresponsables, ya no asistía a la iglesia, no me tomaba tiempo para mi misma, no reflexionaba sobre lo que había sucedido durante el día, y múltiples cosas que sin darme cuenta desaparecieron y empezaron a dañar mi ser.

Mi mamá instantáneamente notó mi cambio, así que decidió llamarme la atención y quiso hablar conmigo, yo, por el contrario, le cerré las puertas y le dije de forma grosera que no me importaba hablar con ella ni con nadie.

Tiempo después, las niñas con las que pasaba mi recreo y por las que cambié, se alejaron de mí y empezaron a criticarme con los demás. Mi vida se había vuelto un caos, los profesores ya no me reconocían y yo tampoco.

Fabián, un compañero de la iglesia se acercó a mi, y me preguntó qué me pasaba, yo estaba altanera, así que el me propuso salir después del colegio, para hablar a solas. Yo acepte, me sentía fatal.

Él siempre quiso ser sacerdote y tenía muchas cualidades para hacerlo, por lo que al estar solos, me dijo:

• Diana, sé que le pasa algo, ya no volvió a la iglesia, y aunque no se necesita ir a un lugar para creer en Dios o reencontrarse consigo mismo, sus actitudes han estado destruyendo a la niña ejemplar del salón.

Yo le respondí:

• Fabián, no me diga esas cosas si yo cambié fue porque María, Alejandra y Angie, me dejarían si yo no cambiaba mi aspecto juicioso que para ellas es llamado nerd. Yo no tengo muchos amigos, quiero ser sociable, todos me miran feo por ser la mas aplicada en el salón, no quiero eso.

Él empezó a leerme unos versículos de la biblia, que en su mochila siempre cargaba, y aunque era aun un niño, él tenía un gran don para dar consejos. El versículo decía así.

Yo no sabía que responderle, él tenía razón, Dios me había creado única e irrepetible, nadie debía cambiar mi aspecto ni yo permitirlo. Fue difícil volver al camino que mis padres habían sembrado en mi, sin embargo él, junto a unos sacerdotes y personas encargadas de la iglesia, me apoyaron durante el proceso.

Tiempo después, poco a poco, volví a mi estado normal, las niñas antipáticas, me miraban peor de feo, pero ya no me importaba, Dios me había vuelto a Él, y solo por sus comentarios absurdos, de ahora en adelante, no me alejaría de nuevo.

Decidí escoger ésta situación porque prevalece la experiencia interior de la persona, centrarse en el más allá de lo físico, a la contemplación de un ser sobrenatural que nos creó y nos guía por un camino correcto.

• Actitudes: Debilidad, al dejarme llevar por los comentarios y caminos que me ofrecieron mis compañeras.

Odiosidad al pensar que con mis cambios podría tener fama y amigos.

Baja autoestima, al momento de ser víctima de bullying.

• Sentimientos: destrucción, baja autoestima, auto conmiseración, tristeza, ceguedad, dolor y odio hacia mi mismo.

Con esta situación aprendí que no debo cambiar por los comentarios negativos de los demás, ser único, integro y con valores, es lo que realmente nos debe importar. Cada uno poseemos diferencias, defectos, cualidades que nos distinguen de los demás.

Los cambios que generó en mí, fue aprender a conocerme y a quererme tal cual soy, seguir mis sueños, no opacar al otro para brillar yo, sino ayudar a los demás a alcanzar sus objetivos sin discriminación alguna.

Dimensión Cognitiva

Mi padre es comerciante de la plaza central de abastos en Villeta, desde hace 28 años, allí ofrece toda clase de productos para el consumo humano, como verduras, frutas y demás.

Desde mis 12 años de edad, mi papá me llevaba a su puesto para mostrarme la manera en que funcionaba, aprendí muchas cosas, a realizar cuentas y la atención al cliente. Mi padre hoy en día tiene 56 años, por lo que se le dificulta un poco realizar las cuentas. Hasta principios de este año yo le llevaba la contabilidad de los contratos con los proveedores, los gastos, ganancias y deudas.

Escogí esta situación porque en la dimensión cognitiva resalta algo importante, y es que a pesar de que es la capacidad para comprender el mundo y demás, es tener la habilidad de comprender, analizar procesos mentales, y aplicar mis conocimientos previos para ayudar a la transformación del mundo e interacción con los otros.

• Actitudes: solidaridad para apoyar a mi padre, en su trabajo y salud.

Compasión para entender la situación que mi padre esta pasando con su salud.

Honestidad para llevar las cuentas pulcramente.

• Sentimientos: cariño, fuerza, empatía, y apoyo mutuo.

Los cambios reflejados de esta situación en mi vida, fueron  mejores de lo que creí, además de poner mis conocimientos en práctica con la realidad, fue, descubrir las capacidades que yo poseo, y cómo puedo, por distintos medios, desarrollarlas y darles vida en abundancia.

Me ayudo a valorar aún más, el trabajo y esfuerzo de mi padre, la mejor motivación para salir de la zona de confort y darle al mundo, un aporte que trascienda por toda la vida.

Dimensión Afectiva

El 19 de agosto de 2019, falleció mi abuelita materna, a causa de una mala higiene en la Clínica Medical Pro-indo, en Bogotá.

A los 69 años de edad, sufrió de insuficiencia renal, agravándose su salud, debido a esto la llevaron al Hospital Salazar de Villeta, donde le concedieron unos análisis en los riñones, que concluyeron su deficiencia máxima. Posterior a eso, la remitieron a la Clínica de Bogotá de tercera edad.

Allí le empezaron a realizar la hemodiálisis, limpiando su sangre, purificándola y de nuevo llevándola a sus arterias, por todo el cuerpo.

Día tras día empeoró la situación, ya que carecíamos de dinero para enviarle sus implementos de aseo. Uno de mis tíos la cuidaba, pero por la anterior razón, se regresó, dejándola sola. Los médicos nombraron este acto como abandono, descuidándola por completo.

La máquina de Hemodiálisis, donde le hacían la limpieza de sangre, estaba infectada, provocando que una bacteria se ubicara en su estómago, y sin darse cuenta, le quitara por completo la vida.

La razón por la que elegí esta situación para la dimensión afectiva, es que la pérdida de un ser querido es el acto mas conmovedor, donde todas las emocione sy sentimientos explotan en un mismo tiempo, el deseo de llorar, de regresar el tiempo, los recuerdos invaden tu cuerpo, haciendo que todo en ti se estremezca.

• Actitudes: La principal actitud que tomé en esos momentos fue la culpabilidad, comencé a culpar a todos la muerte de mi abuela, desde mis tíos hasta los médicos, a mi familia, por no colocarle cuidado a mi abuela desde un comienzo, no escucharla cuando ella decía sentirse mal de salud, a los doctores, por no hacerle un buen mantenimiento a las máquinas con las que atendían a los pacientes.
• Sentimientos: dolor, ira, agresiones contra todo, rencor, resentimiento.

Con esta situación aprendí, que las personas no son para siempre, que los momentos más pequeños de la vida, esos que a veces pasamos por desapercibidos, son los que luego le dan vida a nuestro ser. La muerte de mi abuelita me ayudó a proteger a mis padres, a cuidar a mis seres queridos y también, a realizar justicia. Pues hoy en día sus hijos están en un proceso de medicina legal, donde la Clínica está demandada.

Dimensión Comunicativa

El año pasado, estuve cursando grado once, en donde debía culminar mi labor social, el lugar que me correspondió fue el Centro de vida Sensorial, donde mi función era manejar niños con distintas capacidades realizar talleres de escolaridad.

Había un niño llamado Elvis, que sufría de daltonismo, muchas personas habían intentado enseñarle a contar, pero no lo lograban debido a su discapacidad.

Al principio, sentí que no podría hallar la manera de enseñarle, luego, junto a mi otra compañera, iniciamos la forma de cómo ayudarlo.

Después de una larga investigación, observamos en You Tube, una reflexión de inclusión, donde habían puesto en práctica la situación por la que Elvis pasaba.

Al aplicarlo, tomamos tapas de distintos colores, y le empezamos a dar la sucesión de números, él llegaba hasta el 4 y luego, se devolvía del 10 hacia abajo.

Era un caso perdido hasta ese momento. Yo, leí sobre el daltonismo, y decidí, enseñarle con tapas del mismo color, así él podría descubrir y contar clasificando los colores.

El resultado fue muy conmovedor al observar que el niño pudo contar con las tapas del mismo tono, y tiempo después ya llegaba hasta el numero 20.  

Escogí esta situación porque la dimensión comunicativa contiene distintas formas para la interacción con los demás, con nosotros mismos y con el entorno. Enseñar, es una de las mejores maneras para enseñar que aprender es un arte de la vida.

• Actitudes: la primera actitud que tuve, fue la sensibilidad, al entender que vinimos a esta vida para servir.

Paciencia: no era fácil manejar un niño con virtudes especiales, sin embargo, cuando se quiere con amor una labor, se logra más de lo que piensa.

• Sentimientos: alegría, sensibilidad, amor, dicha, ánimo de servir con paciencia.

Fue un cambio positivo para mi vida, ya que aprendí a fortalecer la honestidad, la sinceridad, la ayuda y amistad mutua, mi capacidad de superarme.

Desde ese momento mi entusiasmo por la vida es mucho más grande, hoy en día tengo la capacidad de adaptarme a cualquier cambio.

Me enseñó a valorar las diferencias, que todos tenemos los mismos derechos de aprender, no importa los medios, sino las ganas y la sensibilidad de los demás para ayudarnos mutuamente.

Dimensión Estética

Desde hace 8 años, hago parte de una Corporación teatral llamada Samán Colombia, la cual integra a todo tipo de niños, para formar obras teatrales, musicales y demás.

En una ocasión, el profesor Andrés, nos llevó a hacer parte de un concurso en               Tocancipá donde debíamos expresar con nuestro cuerpo la belleza creada en el mundo.

Fuimos 3 niñas, para competir, ya que era en grupos pequeños. Nosotros, habíamos preparado, una representación mímica llamada “la tierra se está muriendo”, donde nosotras éramos animales, y solo un audio nos representaba todo el acto. Con nuestro cuerpo, expresamos la belleza del mundo creada al principio de todo, luego cómo el ser humano la destruyó, con sus actos y creaciones.

Logramos ganar el concurso, nos dieron reconocimientos por haber manejado muy bien nuestra expresión corporal y demostrar la belleza que se ha perdido.

Escogí esta situación ya que la dimensión estética, nos enseña a apreciar la belleza, admirarla y a transformarla en el mundo. Nos enseña el respeto por las culturas y su valoración.

• Actitudes: buenas relaciones interpersonales, compromiso con los demás y conmigo misma, disciplina y sensibilidad.
• Sentimientos: infinita alegría, astucia, motivación, felicidad, paz interior.

Esta experiencia, me motivó a seguir aprendiendo y reconociendo la belleza de mí misma, del otro, y del mundo, para así poder ayudar a su transformación.

La belleza, aunque es relativa, no está en algo físico sino en las pequeñas cosas de la vida, y se puede expresar mas que con palabras, con una obra de caridad, con amor, con justicia y perdón.

Dimensión Corporal

El año pasado, a partir del mes de septiembre, decidí ingresar al gimnasio de Villeta, con el fin de obtener masa corporal, al llegar, el instructor me hizo las correspondientes observaciones, una de ellas, fue, que no estaba alimentándome sanamente, debía llevar una dieta saludable, para que el cuerpo tomara los suficientes nutrientes para su desarrollo y crecimiento adecuado.

Inicie con 40 kilogramos de peso, estaba muy baja de acuerdo con los estatutos de mi edad, así que hice un compromiso conmigo misma de quererme aun mas, y auto superarme.

Poco a poco, paso el tiempo, y a los dos meses, me tomaron de nuevo las medidas y observaciones, a lo que el resultado fue muy gratificante, había subido a 48 kilogramos. Aun, me estoy esforzando por obtener la masa deseada y una saludable nutrición.

Escogí esta situación, ya que rescata el cuerpo como fundamento de la vida, se relaciona con el movimiento, el control de los músculos y la psicomotricidad fina y gruesa.

• Actitudes: Tomar una decisión en primer lugar, de conocerme a mi misma, efectuar mis defectos, cuidar a mi cuerpo.

Compromiso para darle a mi cuerpo el lugar que se merece, un lugar prioritario ya que es el que me ayuda a desarrollarme mejor.

• Sentimientos: alegría, mejor auto-estima, auto-conocimiento.

Esta situación de vida, me ayudó a comprender que la salud es una prioridad y no una opción de segundo plano. La salud, la integridad física son importantes para nuestro desarrollo, todo esta conectado mutuamente, si no comes, no tienes salud, ánimos y te debilitas, así que mi moraleja, es cuidar mi cuerpo, mi alma, y ayudar a otros a obtenerlo.

Dimensión Socio – Política

En el año 2013, cuando cursaba grado quinto, fui escogida por mis compañeros para ser candidata a la personería estudiantil. Al realizar mi campaña puse en primer lugar, velar por los derechos y deberes de la escuela, luego, proporcionar distintos talleres pedagógicos donde pudiéramos aprehender mejor de la realidad y poner en práctica nuestros conocimientos, entre otras propuestas. Al momento de la elección yo obtuve 594 votos, siendo ahora la nueva personera estudiantil. Durante mi cargo, me caractericé por ser integra, responsable, cumplir mis propuestas y dar ejemplo de la disciplina y compromiso.

Escogí esta situación ya que la dimensión socio-política nos habla acerca de la interacción con los otros para asumir un compromiso solidario y comunitario en la construcción de una sociedad justa, participativa y equitativa.

• Actitudes: fui una líder sobresaliente, medidora de las relaciones interpersonales entre todos, representé con orgullo el nombre de mi institución, tuve sentido de pertenencia, entre otros.

• Sentimientos: solidaridad, compromiso, sentido de pertenencia, alegría inefable, motivación, serenidad, prudencia.

Con esta experiencia aprendí a ser una líder desde pequeña, a confiar en mí misma, arriesgarme por mis sueños, ser ejemplo para los demás, no olvidarme de mis valores y sobre todo, tomar decisiones que ayuden a mi bienestar y al de mi entorno.