El ECO Museo Experimental

MUSEO EXPERIMENTAL DEL ECO

Una arquitectura cuya principal función es la emoción; suena bonito, me gusta como se lee, cabria preguntarse a que tipo de usuario va dirigido, a un filosofo, un economista, un obrero, empresario. Si bien se busca sacudirse un poco la racionalidad de los edificios y su objetivo es un producto cuya “función” sea la emoción, el provocar sensaciones es algo ambiguo, ¿que tipo de sensaciones? no a todos emociona lo mismo, no podemos sentir igual, pensar igual, entendemos de manera diferente, nos provocan cosas distintas.

Habría que pensar si este tipo que arquitectura tiene cabida hoy día, si es así, ¿para quien va dirigida? y si no ¿por qué aún se piensa y se enseña como innovadora en algunos talleres de la facultad? Hay que tomar en cuenta que esto fue escrito hace casi 60 años. Hoy vivimos en una sociedad mucho más compleja. ¿En verdad se aspira a una elevación espiritual? Como lo referencia Goeritz, ¿Cuanto tiempo de nuestra vida pensamos en lo espiritual?

El arte como un instrumento de comunicación. Aspira a recuperar una arquitectura que se entienda como arte (un reflejo espiritual del hombre) ¿cual es el espíritu del hombre contemporáneo?, vivimos entre el consumo y poco pensamos en lo espiritual, no tenemos tiempo para hacerlo, entre la escuela el trabajo, etc.

¿Quién en verdad tiene hoy, acceso al arte?, a la educación a un nivel de pensamiento “superior” (mas profundo), ¿Quién se preocupa de eso? ¿a quien le emociona ver un muro amarillo? Quien se preocupa por cuestionar el arte? ¿Quien se detiene a pensarlo?, ¿quien tiene el tiempo para hacerlo?

Hablar de arquitectura emocional, podría solo sintetizarse en edificios para el servicio de una elite, un edificio esta hecho a para brindar servicios. Será que la función del arte es someterse a la voluntad de quien la requiere, en vez de liberar al artista.

Creo que si se busca revolucionar la arquitectura racionalista, más que buscar que esta comunique sensaciones debe hacer. Sentir al hombre la necesidad de pensar, de cuestionarse lo que es. Una arquitectura que le provoque el pensamiento.

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