¿El Hombre Es Egoísta O Empático En Su Naturaleza

La teoría económica nos dice que el ser humano tiende a maximizar sus beneficios y reducir sus costos, esto significa que las personas generalmente toman sus decisiones dependiendo de cuál les resulte más ventajosa (los beneficios sean mayores a los costos). Por otro lado, Adam Smith no contradice el egoísmo del hombre, sino que menciona que en la naturaleza de las personas existe algo más que eso: la empatía. Es decir, lograr ponerse en el lugar del otro a pesar de no estar viviendo la misma situación. Se menciona la aptitud del hombre para alegrarse por el bienestar del otro y para sentir tristeza o compasión por el sufrimiento o dolor ajeno.

A mi juicio, tanto la teoría económica como las afirmaciones de Smith son correctas. Con esto me refiero a que, a pesar de parecer contrarias, ambas posibilidades confluyen y forman lo que es el ser humano. Esto no quiere decir que todos tengamos la misma capacidad de empatía o seamos igualmente egoístas, sino que cada persona tiene un grado de egoísmo y un grado de empatía desinteresada por el otro.

Cuando una persona necesita de la felicidad del que está al lado para ser feliz, o el malestar del otro le importa tanto que entrega ayuda sin esperar nada a cambio, podemos decir que que posee un grado de empatía muy desarrollado. Unos ejemplos de este tipo de personas son los santos, como San Alberto Hurtado quien decía: “Dar hasta que duela”, otro ejemplo es Felipe Cubillos, el creador de la fundación Desafío Levantemos Chile, que se dedica a reconstruir Chile y ayudar a superar la pobreza del país.

Por otro lado, cuando vemos a personas que parecen solo actuar para su propio beneficio sin interesarse en cómo sus acciones (o sus omisiones) están afectando a su prójimo, nos encontramos con alguien con un grado de egoísmo muy desarrollado. Un ejemplo de esto son los asaltantes y estafadores.

Al analizar a ambos tipos de personas nos damos cuenta de cómo tanto la teoría económica como las afirmaciones de Smith se encuentran presentes en las acciones de personas de nuestra sociedad. Pero el que una persona sea descrita como empática no quiere decir que todas sus decisiones estén centradas en la persona que está al lado, sino que también, como todo ser humano, toman decisiones para beneficiarse. Así también, al decir que una persona es egoísta no se está haciendo alusión a que esta persona nunca actúe empáticamente, no se conmueva o no sienta felicidad por el bienestar de su prójimo. Las personas son egoístas por esencia así como también todas tienen un grado de empatía.

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