Ensayo sobre L'Allegorie Du Patrimoine de Françoise Choay

24/05/2013

Ensayo sobre L'Allegorie Du Patrimoine de Françoise Choay

Desde los años ochenta, la conservación y la valorización del patrimonio urbano han ido adquiriendo un carácter cada vez más prioritario en las políticas urbanas. La emergencia  en el urbanismo de planteamientos favorables a las tramas densas y mixtas o la opción estratégica que muchas ciudades han hecho por el turismo, son fenómenos que contribuyen a explicar esta creciente preocupación por el patrimonio histórico y cultural. Sin embargo, la inserción del patrimonio en la ciudad contemporánea no está ni mucho menos exenta de problemas, entre los que se pueden señalar la musealización de centros históricos, la destrucción de tejidos antiguos o los impactos negativos ocasionados por la afluencia masiva de turistas. Las actuaciones de los políticos y técnicos no siempre han sido todo lo respetuosas que cabría esperar y en demasiadas ocasiones han implicado una auténtica banalización del patrimonio urbano. Es preciso juzgar críticamente muchas de las actitudes oficiales y denunciar aquellas intervenciones que no sean lo suficientemente cuidadosas con la herencia construida de la ciudad.

Choay se pregunta si vale la pena seguir construyendo monumentos para el futuro  y cuál sería su papel con el aumento en el nomadismo social, y la importancia en el futuro.

Los patrimonios han ido adquiriendo una fuerte influencia e importancia a lo largo de la historia es un tema muy relevante. Puesto también en como uno ve un patrimonio, donde la estética de la fachada y su estructura son lo más importantes a la hora de apreciar como tales patrimonios en su haber.

¿Pero se le da   valorización  a los patrimonios por parte de todo el mundo?; puesto que la pregunta en sí amplia este concepto ya que como nación, el patrimonio de un país conforma una parte trascendental de su identidad. Es por eso que la respuesta puede detonar en cada cultura, religión, país, entre otros; puede apreciar de distintas maneras una obra histórica, ya que  el patrimonio testifica la experiencia humana y sus aspiraciones y debe ser una experiencia compartida que ofrece a cada ser humano la oportunidad del descubrimiento propio como otra persona en ese caudal de conocimiento que no es el propio. Personalmente  el valor más importante del patrimonio es la diversidad, pero la diversidad de este patrimonio debe tener el propósito de unir a los diversos pueblos del mundo a través del dialogo y el entendimiento, viéndolo por el  lado cultural histórico.

Por ejemplo se demuestra como de forma de monumento histórico o reconocimiento de este, en el renacimiento como se apreciaba la antigua arquitectura (que era del antiguo imperio romano). Y es por lo mismo que dentro de la forma en que se aprecia la obra se denominan y combinan dos formas una de mirar y la otra de conocimiento sobre la obra, y por tal sabe cuál es su importancia en la historia; esto lleva a que se aprecia  una obra tanto por su importancia de legado e importancia cultural; como también por su estética y visión de cómo es la obra.

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