Ensayo sobre La Apología de Sócrates de Platón
Enviado por • 11 de Junio de 2014 • 339 Palabras (2 Páginas) • 218 Visitas
Ensayo sobre La Apología de Sócrates de Platón
Introducción
Sócrates fue obediente con respecto a las leyes de Atenas, el creía que tenía el propósito de ejercer la filosofía y que podría servir a mejor a su país dedicándose a enseñar a las personas de que se ocuparan de su alma.
Aunque fue un patriota y con grandes convicciones religiosas, irónicamente no fue bien visto por sus semejantes porque les disgustaba su forma de ver al estado y la región en ese tiempo. Posteriormente fue acusado de despreciar a los dioses del Estado y de introducir nuevas deidades.
En La Apología de Sócrates, Platón recoge lo esencial de la defensa que Sócrates hizo de sí mismo en su propio juicio.
Desarrollo
Sócrates realiza un discurso en defensa contra los que le acusaban. Se defiende de: Melito, Licón y Anito. Sócrates hace un discurso de su inocencia, insistiendo en que él claramente dice la verdad. El acaba su defensa dejando la justicia en manos de los atenienses, es decir los jueces y dejando claro que no es un hombre ateo.
Sócrates es condenado, después de haber votado todos los jueces. Hay más votos en contra que a favor, y por eso no consigue el perdón. La condena impuesta por Melito era la de la pena de muerte.
Pese a que Sócrates decidió como condena, pagar una multa dentro de sus posibilidades, los jueces eligieron condenarlo a la pena de muerte propuesta por su acusador.
Sócrates se despide de los jueces que le habían condenado y de los que le habían absuelto. En esa época se acostumbraba a creer que una persona que estaba a punto de morir poseía un don para predecir el futuro. Así que, Sócrates predice el futuro a los que le condenaron, diciendo que les llegará un castigo mucho más duro que el que él ha recibido. Ahí dio por finalizada la conversación con los jueces que lo condenaron. Sócrates antes de morir, realiza una súplica a los jueces: que cuando sus hijos sean mayores les convenzan y les hostiguen como Sócrates hizo con ellos también.
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