Grecia Antigua

GRECIA.

En Atenas, los ciudadanos eran auténticos nobles, y como tales no se ocupaban más que de la defensa y la administración pública. Con su tiempo libre a disposición de la Republica, velaban intelectual y corporalmente por los intereses de ésta, depositando las tareas indignas en los esclavos. En Lacedemonia, las mujeres de los ciudadanos no podían tejer o hilar para así poder conservar su categoría. Sócrates dice que el ocio es la más bella de las riquezas. Y Platón, en la Republica manifiesta:

“La naturaleza no hace zapatero ni herrero; semejantes ocupaciones degradan a la gente que las ejerce, viles mercenarios miserables sin nombre que son excluidos de los derechos políticos por causa de su mismo estado. En cuanto a los comerciantes, acostumbrados mentir y engañar, no se sufrirá en la ciudad más que como un mal necesario. El ciudadano que se envilezca por el pequeño comercio será perseguido por ese delito. Si es convicto, será condenado a un año de prisión. La pena será doble a cada reincidencia.”

En la Grecia el esplendor los filósofos podían discutir de cualquier cosa, menos de la necesidad del tiempo libre, lo que ellos tomaban como una importante condición para que el hombre alcanzara su dignidad, por lo que el tema era incuestionable. En la vida cotidiana esto trajo desprecio por el trabajo forzado, y los que tomaron el mando de esta revuelta fueron los esclavos que eran privados del ocio.

Herodoto, quien diera carácter científico a la historia hizo la siguiente observación: Aunque no lo podía afirmar el tenía la idea que los griegos habían tomado el desprecio por el trabajo de los egipcios, ya que se había suscitado el mismo comportamiento entre los tracios, los escitas, los persas, los lidios; en una palabra porque la mayor parte de los barbaros, los aprendices de las artes mecánicas e incluso sus hijos son considerados como los últimos ciudadanos… Todos los griegos fueron educados como príncipes, principalmente los lacedemonios.

El reconocimiento del ocio fue el elemento más significativo para la vida de los ciudadanos, ya que encuentra sentido en el desarrollo personal en el que se equilibraban las actividades físicas y espirituales. Para su realización se presenciaron los juego olímpicos en el año de 884 antes de Cristo, y del principio de las segundas las llamadas escuelas significaban ocio o descanso.

Aristóteles nos plantea que las ciencias se dieron gracias al ocio del hombre, así inventaron las matemáticas.

Deporte, ciencia, filosofía, arte y política formaban parte de una estructura social fincada en el tiempo libre de las elites y en el trabajo degradante de los esclavos.

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