Karl Jaspers

Karl Jaspers:

Creció en el seno de una familia acomodada, de orientación democrática y liberal- conservadora, y fue en aquel medio donde arraigaron sus reservas con respecto al estado autoritario y, con el, el militarismo y a la sociedad estamental que prevalecieron en la época imperial. Jaspers vio el estallido de la 1 guerra mundial como una ruptura con la tradición occidental. Durante la dictadura de Hitler tanto su vida como sus obras estuvieron en peligro. Para comprender el discurso de Jaspers es necesario tener presente que su trayectoria conduce a la filosofía a través de la ciencia.

Jaspers definió la relación reciproca entre ciencia y filosofía. A fin de poner de relieva a la esencia de la ciencia, destaca tres rasgos fundamentales: el saber científico es una saber metódico; es decir, conoce el conducto por el que ha sido obtenido, en que sentido y con que limitaciones. El saber científico es forzosamente cierto; es decir, es razonable para todo entendimiento; y el saber científico tiene una validez general, ese decir, es reconocido sin limitaciones por aquellos que lo comprenden en su relatividad.

Jaspers para luego a examinar los límites de la ciencia, y constata que el contenido científico objetico no es el conocimiento del ser. Esta orientado a lo individual, y no a todo. El conocimiento científico en modo alguno permite postular fines para la vida.

Por ultimo Jaspers se pronuncia sobre la relación entre ciencia y filosofía, disciplinas que no coinciden, sino que tienen un origen, métodos y sentido de la verdad sustancialmente diversos y entre las que hay, sin embargo, una vinculación.

La ciencia se abstiene con respecto a la filosofía, puesto que se resiste a confundirse a confundirse con ella, pero le deja espacio libre en su propio campo y ejerce una crítica tanto de concepciones no fundamentales como pretendidas demostraciones.

La filosofía se abstiene con respecto a la ciencia, aunque la reconozca como indispensable y se vincule a ella.

La filosofía de Jaspers tiene como impulso permanente la experiencia de que la psicología general solo reconoce los problemas de la realidad. Esta filosofía desarrolla la idea de que el ser humano no solo esta ahí, sino que además quiere estar; esta obra se divide en tres aspectos: la orientación en el mundo como búsqueda de la realidad objetiva, el esclarecimiento existencial como llamada al ser autentico y la metafísica como conjunto de la transcendencia. Se otorga en ella un papel predominante al ser humano como existencia posible, que no cabe esclarecer racionalmente mediante conceptos, sino mediante signos. Solo indirectamente hay que ocuparse del ser humano autentico que acepta la configuración histórica y preserva la libertad.

En 1935 en sus lecciones de razón y existencia Jaspers introduce un énfasis distinto al cambiar la interrogación sobre lo circunvalante, descrito como aquello que no visible. Ese circunvalante se divide reflexivamente en el ser mismo, que todo lo es, en el cual y por medio del cual somos, y que Jaspers denomina muy trascendencia, y el ser que nosotros mismos y en el cual se nos presenta toda forma determinada de ser. Jaspers se representa este circunvalante como ser ahí (Dasein), consecuencia en general, espíritu y existencia posible.

Quien desee conocer la peculiaridad distintiva del filosofar de Jaspers debe aprender la relación entre ciencia, existencia y razón. Cada vez que se aisla o absolutiza un punto de vista se traiciona la totalidad de este pensamiento volcado hacia el mundo y superador del mundo. Precisamente en es vinculación radica la fertilidad de este discurso filosófico.

• Jaspers y la educación: Jaspers se ha manifestado de manera sistematica sobre la educaciones en un obra pedagógica. Sin embargo, sorprende la cualificada y convincente que consigio explicar el multifacético fenómeno de la educación en referencias ocasionales y aforísticas.

1) La educación como acción: Jaspers revela la cualidad específica de la educación comparándola con el hacer, el crear, el instruir y el dominar. Mientras que en el hacer se produce algo a partir de un material y según un calculo racional, en la actividad creativa se realiza una obra cuya forma es interminable. En el dominar se somete al otro, ya sea este la naturaleza o un ser humano, a una voluntad y finalidad extrañas.

El joven se introduce por si mismo a la realidad vigente en cada momento, que puede experimentar multilateralmente en el ocio, en el trabajo en la “praxis”. El catalogo de esta “praxis” tentativa abarca desde la rutinas de las formas de trabajo hasta la aprehensión espiritual del contenido original en poesía.

La educación no se consuma de manera uniforme. Transforma a lo largo de la historia, y en las diversas sociedades asume formas diferentes. Jaspers concibió tres formas fundamentales. La educaciones escolástica, se limita a la reproducción de una materia fijada de una vez por todas, que es comprendida en formulas, y dictada y comentada con facilidad. Diferente a ella es la educación magistral, que conlleva con veneración sumisa de una eminente personalidad indiscutible como autoridad indiscutible. En la educación socrática es donde se alcanza el mas profundo sentido, pues en ella no existe una doctrina firma, sino que impera el cuestionar ilimitado y el no saber en sentido absoluto. Se entiende a la educación como el elemento en el cual los seres humanos, unos con otros, vienen a ser si mismo.

Sin duda Jaspers rompe con el marco de las definiciones de educación racionalista, psicologistas y sociologista cuando registra que la organización y el aparato amenazan la vida humana. Jaspers distingue entre la necesidad de una planificación particular y significativa y la infortonio de la planificación total. El que la libertad y responsabilidad de ser humano estén fuera de los realizable y planificable tiene una alta significación pedagógica.

Jaspers no rechaza la planificación global, sino que critica el falso espíritu de planificación que pretende abarcar lo inconcebible.

Para Jaspers, la educación se consuma en la tensión entre el pasado, presente y futuro.

Jaspers considera indiscutible que toda educación consciente presupone una sustancia. Karl reconoce que el respeto es la sustancia de toda educación. El ser humano no puede existir sin el pathos de un absoluto. Este absoluto generador de sentido puede asumir diversos contenidos.

Jaspers diagnostica: la educación entre en crisis cuando la sustancia de todo, se encuentra en disolución. La educación descuida la conducción del niño a la grandeza de un todo omnicomprensivo. La educación se transmite en muchas cosas porque la sustancia heredad históricamente por los seres humanos se descompone. Jaspers enumera como

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