Sabemos con seguridad sólo cuando sabemos poco; con el conocimiento, la duda aumenta.

Colegio “Simón Bolívar” 

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Investigación Ciencia y Tecnología

Ensayo

Ericka Tipán

Tercero de Bachillerato “C” Ciencias

MSc. Carlos Viteri

2017 - 2018

Sabemos con seguridad sólo cuando sabemos poco; con el conocimiento, la duda aumenta.

     A lo largo de nuestras vidas vamos formando conocimientos sobre un sin fin de cosas, pues cada día estamos expuestos a nuevas experiencias, que nos dan como resultado la obtención de nuevos conocimientos, o la formulación de nuevas preguntas acerca de temas que suponíamos ya conocer. Estamos en constante aprendizaje, desde pequeños sentamos las bases de ciertos conocimientos que vamos profundizando a medida que crecemos.

     El conocimiento es la reproducción mental del mundo material en la conciencia humana. En el proceso del conocimiento interviene un sujeto y un objeto; el sujeto es quien conoce, y el objeto es aquello que se da a conocer. El sujeto, a través de sus sentidos, es capaz de percibir la información que emana del objeto, procesarla y finalmente, gracias a su capacidad racional, convertirla en conocimiento. Así podemos entender que somos nosotros mismos quienes creamos el conocimiento, lo único que obtenemos del mundo material es la información para crearlo.

     Si nos remontamos al pasado nos vamos a dar cuenta que desde siempre el ser humano ha sido curioso, es nuestra naturaleza, esta cualidad es la que nos ha permitido desenvolvernos en el medio y poder evolucionar como especie, preguntas como ¿qué es?, ¿para qué sirve?, ¿cómo funciona?, ¿de dónde proviene?, ¿de qué está hecho?, entre otras innumerables cuestiones que nos hemos planteado a lo largo del tiempo para poder comprender el mundo en el que vivimos, nos han conducido a grandes descubrimientos, que han contribuido notablemente en el desarrollo de diferentes teorías. La curiosidad genera dudas, y las dudas son la base del conocimiento. A medida que dudamos nos vamos formulando varias interrogantes que van a impulsarnos a buscar respuestas, de esta manera estamos obligándonos a investigar más acerca de lo que queremos saber, por la necesidad de encontrar un por qué de las cosas, por la necesidad de explicar todo acerca de lo que nos rodea. Si no dudamos de lo que nos dicen, y aceptamos toda información que se nos proporciona sin cuestionar, no podremos afirmar con fiabilidad la validez del conocimiento que estamos creando; sin primero dudar no podemos aseverar que los conocimientos generados no son erróneos. La duda es lo que nos brinda la capacidad de poder catalogar con seguridad cierta información que se nos ha dado, ya que, como ya he mencionado, al tener dudas, en nuestro afán por aprender, nos vemos forzados a investigar para de esta manera poder argumentar con certeza la veracidad o falsedad de algo.

     “Sabemos con seguridad solo cuando sabemos poco; con el conocimiento, la duda aumenta”, esta es una cita del poeta, novelista, dramaturgo y científico alemán, Johann Wolfgang von Goethe, la cual expresa que a medida que adquirimos más y nuevos conocimientos también estamos dando paso a que se generen nuevas inquietudes, nuevas preguntas acerca de aquello que creíamos conocer, ya que nos damos cuenta de que la información que tenemos en realidad es muy escasa, pues al profundizar la información que tenemos sobre un tema salen a flote nuevas cuestiones que aún no hemos resuelto, de las cuales todavía no conocemos, mientras seguimos investigando van a seguir surgiendo más y más interrogantes acerca de lo que descubramos, y en consecuencia estas interrogantes van a necesitar de respuestas. Junto al conocimiento las dudas también aumentan; no podemos dudar sobre algo que no conocemos, es por esto que cuando sabemos poco, aceptamos sin cuestionar, las ideas de los demás, ya que no estamos en la posición de refutar lo que dicen, sin argumentos que se sustenten en algo, no podemos negar o afirmar la validez de algún juicio, por ejemplo: en la antigüedad, cuando aún no se tenía suficiente información acerca de las causas por las que se producen ciertos fenómenos naturales, se creía que estas catástrofes eran producto de un castigo enviado por los dioses, por algo malo que hicieron, estos dioses eran creados por cada cultura, por tanto, eran representados de distintas formas; ya con el paso del tiempo, y con los avances científicos, en la actualidad conocemos que estos fenómenos son producidos por diversos factores que no tienen nada que ver con algún ser divino, así nos podemos dar cuenta que con la información necesaria podemos refutar algo de lo que antes se tenía la plena seguridad de que así era, porque se conocía muy poco y no se tenían los argumentos suficientes para decir lo contrario.

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