Amenaza extranjera. La consumación de la Independencia en 1821

Amenaza extranjera

La consumación de la Independencia en 1821 le proporcionó a la antigua Nueva España la posibilidad de erigirse en un Estado independiente que gozara de plena soberanía; es decir, que tuviera la autoridad suprema de autogobernarse y tomar sus propias decisiones sin la intervención de otro país en sus asuntos internos.

La fundación de México como país independiente no logró el inmediato reconocimiento de las potencias mundiales, y el país tuvo que estrechar relaciones con la finalidad de alcanzarlo.

El reconocimiento internacional ocurre cuando un Estado acepta o asiente una situación específica. En política exterior se usa generalmente cuando un Estado reconoce la existencia e independencia de otro.

El reconocimiento internacional fue una de las prioridades de los primeros gobiernos, debido a que esto podría derivar en beneficios para la nación, como el acceso al crédito extranjero, la celebración de tratados comerciales que potenciaran al sector mercantil y la existencia de contacto diplomático para dirimir cualquier discrepancia que pudiera derivar en conflicto.

Algunas naciones americanas recién independizadas de España, como Chile, Colombia y Perú, fueron las primeras en reconocer el estatus independiente de México.Sin embargo, los reconocimientos internacionales que más interesaban a las autoridades del país eran los de las principales potencias económicas y políticas, como Inglaterra, Francia o Estados Unidos de América, o incluso el de España.

Estados Unidos de América

Estados Unidos de América reconoció de forma temprana a México como nación independiente a finales de 1822.

Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda

El Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda, del que formaba parte Inglaterra, reconoció a México como Estado independiente en 1825.Un año después, en 1826 ambas naciones firmarían el Tratado de Amistad, Comercio y Navegación.

Francia

Francia reconoció a México como país soberano en 1830, bajo el régimen del rey Luis Felipe I.

España

La postura del rey Fernando Vll y los intentos de reconquista española durante la década de 1820 retrasaron el reconocimiento por parte de España, el cual llegó hasta 1836, cuando el monarca ya había muerto.

El reconocimiento de la Gran Bretaña animó a otras naciones europeas a celebrar tratados similares con México, los cuales implicaban su reconocimiento como país independiente.

No obstante su importancia, el reconocimiento internacional no constituyó una garantía para evitar acciones hostiles desde el extranjero en contra del país. Por el contrario, las potencias mundiales generalmente intentaban imponer tratados comerciales benéficos para ellas, que les brindaran ventajas competitivas respecto a otras naciones con las que rivalizaban en materia económica y comercial.

En la política internacional se conoce con el nombre de intervención a todo acto mediante el cual un país independiente se involucra en los asuntos de otro, lo que violenta su soberanía nacional.

Las intervenciones no siempre implican el uso de la fuerza militar, pues también pueden consistir en actos de presión económica o política. Por lo general, un país interviene en otro con la finalidad de forzarlo a adoptar medidas, compromisos o actitudes que benefician al Estado agresor.

De todas las naciones del mundo, México tenía mayor afinidad, además de una historia compartida, con España, su antigua metrópoli. Los Tratados de Córdoba, firmados en 1821 por Agustín de Iturbide y Juan O’Donojú, máximo representante de España en el Virreinato, acordaron la Independencia de México. Sin embargo, estos documentos nunca fueron reconocidos por el gobierno español.Por el contrario, la Corona se negaba a aceptar su derrota y la pérdida de sus territorios ultramarinos en América. No obstante, las últimas tropas españolas situadas en México fueron finalmente derrotadas y expulsadas del territorio en 1825, luego de que fueron desalojadas del fuerte de San Juan de Ulúa, en Veracruz.

Estados Unidos de América

La frontera entre Estados Unidos de América y México no estaba del todo definida, situación que se remontaba hasta los tiempos del Virreinato. En esos límites había un territorio muy grande, conocido como Texas, el cual se encontraba poco habitado y muy mal comunicado con el centro del país, debido a su lejanía y a las pésimas condiciones de los caminos.

Durante el Virreinato, Texas comenzó a ser colonizada por migrantes estadounidenses, quienes además llevaban consigo esclavos negros para trabajar en las plantaciones de algodón. Sin embargo, durante los primeros años de vida del México independiente, la población estadounidense asentada en Texas, que ya triplicaba a los residentes criollos y mestizos, estaba profundamente inconforme con las medidas y disposiciones tomadas por las autoridades mexicanas.

Muchas de las medidas que molestaron a los residentes estadounidenses de Texas fueron establecidas en la Constitución de 1824 (la primera oficial en la historia del país). A pesar de ser varias de ellas disposiciones constitucionales, los colonos norteamericanos no las acataban. Mantuvieron a sus esclavos, vendían las tierras y profesaban el protestantismo. Para la década de 1830, la mayoría de la población radicada en Texas tenía mayor afinidad social y cultural con Estados Unidos de América que con México.

El gobierno mexicano poco pudo hacer para evitar que los colonos estadounidenses desobedecieran sus reglas, debido a que los territorios situados más al norte tenían poca presencia de las autoridades. Las discrepancias entre el gobierno nacional y los texanos llevaron a estos últimos a preparar su separación de la República. Las mismas autoridades de Estados Unidos de América, movidas por sus ambiciones expansionistas, anhelaban incorporar a su territorio a Texas y otras partes del norte de México.

En 1835, cuando México abandonó el federalismo como forma de gobierno y adoptó el centralismo, los representantes de varias regiones del país manifestaron su descontento con la decisión. Entre ellos, se encontraban los colonos de Texas, quienes aprovecharon la coyuntura para iniciar su proceso de independencia respecto de México.

Independencia de texas

En octubre de 1835, los colonos se levantaron en armas en contra del gobierno centralista mexicano, presidido por Antonio López de Santa Anna. Si bien se rebelaron enarbolando el federalismo, en realidad luchaban por su independencia.

Los colonos proclamaron la independencia de Texas el 2 de

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