Camino De Bolicar
Enviado por adriandgm • 4 de Noviembre de 2014 • 338 Palabras (2 Páginas) • 235 Visitas
Y en un acto sólo digno de los inmortales, supo elegir la fecha de su desaparición física, para así dejar un mensaje a las nuevas generaciones bolivarianas: eligió como fecha de su muerte, la misma fecha en que nació la unión americana… El 17 de diciembre de 1830 muere Bolívar y con él la Gran Colombia que había surgido once años antes, un también 17 de diciembre de 1819… Ese año de 1830 fue de luto para América: murió la unión americana de la Gran Colombia, murió Antonio José de Sucre el Gran Mariscal de Ayacucho, y murió el Gran Líder de la revolución bolivariana… Al momento de la autopsia, y de verificarse el buen estado de sus órganos, el Dr. Réverend escribiría en su Diario observaciones que evidencian la intención del Libertador de sacrificar su vida:
“Debo confesarse que afecciones morales vivas y punzantes como debían ser las que afligían continuamente el alma del General, contribuyeron poderosamente a imprimir en la enfermedad un carácter de rapidez de su desarrollo, y de gravedad en las complicaciones, que hicieron infructuosos los socorros del arte de la medicina… El sepulcro estaba abierto aguardando la ilustre víctima, y hubiera sido necesario haber un milagro para impedirle descender a él… Su cadáver sorprendentemente no presenta señal alguna de maltratos ni heridas… es un cuerpo virgen”
Algo inverosímil para un guerrero de la talla, valentía y agresividad del Libertador, a quién Martí, el héroe de Cuba llamó: “Bolívar El Inmortal”, y de quién Wilfredo escribió: “En qué viene a parar la grandeza, los honores, las riquezas y los talentos..! Pero sus grandes hechos no perecerán nunca: están escritos con el dedo del eterno en el libro de la inmortalidad”
“Que abandonen los Santanderistas toda esperanza, porque el Libertador es inmortal. Nunca morirá aunque lo quemen. Y si así fuera, todo el mundo erigiría al Libertador en su santo; hasta yo, si fuera tan floja que le sobreviviera, haría de él mi santo; la desesperación de su muerte me llevaría a hacer toda clase de temeridades”
Manuela Saénz
...