Camino,destino Y Compañia

Caminando por los mismos senderos desde pequeño, mirando siempre atentamente el suelo, pateando las piedras contando cuantos metros se alejan de mi, acercando los pasos hasta mi destino, con cada pisada dejo atrás un yo distante, lejano y por sobre todo mío con una incógnita diferente en cada ocasión.

Mientras me alejo de mis pasos y el sonido de ellos se vuelve eco en el horizonte pienso en distintas lecciones que aprendí de pequeño. La gente pasa a mi lado pero no me ve, me siento invisible, una mano toca mis dedos, se trata de pétalos de rosas manchados de rocío, mojan la yema de mis dedos que suavemente paso por mis labios, desalojo la última duda y me lanzo a mi destino.

El camino se vuelve eterno cuando hay miles de cosas por pensar, cuando te atormentan locas teorías que solo tienen cabida en tu mente. El presente se fusiona con el pasado mientras el futuro pasa por el lado haciendo un gesto poco amigable, siendo testigo de ello quedo perplejo, esperando un desenlace del cual seré protagonista tarde o temprano.

Por ir mirando al suelo choco contra una superficie suave, dos pechos y un aroma único y sutil a perfume me dan la bienvenida, manos delicadas deslizan sus dedos por mi cara, una angelical voz de doble tonalidad se dirige a mi y me dice; “ya estas en casa…”, labios rojos y carnosos se funden con los míos en un apasionado beso, mis ojos se abren de par en par y dejo tu mirada entrar en mi alma, la escena es para envidiar.

Resulta que los pasos me llevaron a un sendero en común con otro caminante, que al igual que yo venía arrancando de sus propios pasos, al encontrarnos nos tomamos de la mano y viajamos juntos, saltando y evadiendo los baches que nos tiene preparado el destino.

Aprieto fuerte su mano, mientras me da vueltas en la cabeza la idea de que lo que aprendimos de pequeños nos acompaña hasta que seamos los mas viejos de los viejos que ahora nos observan mientras caminamos juntos unidos por la mirada.

Y así, seguimos caminando, arrancando de la experiencia, creando nuevos senderos, admirando el camino que se vuelve cuesta arriba mientras el progreso nos comienza a abrazar con cada obstáculo que sorteamos con éxito, siendo testigos incrédulos de como esto se sigue escribiendo nada mas que con la tinta de nuestros deseos, de lo que siempre deseamos y ahora se vuelve realidad y se sella con un beso, o simplemente al oído con un sentido; “te amo”…

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