El príncipe – Nicolás Maquiavelo.

El príncipe – Nicolás Maquiavelo

Dicha obra comienza hablando de los nuevos hereditarios llamados principados. Básicamente divididos en dos categorías: hereditarios y nuevos. La primera categoría viene de antepasados y de ser heredero de algún reino; los principados nuevos se obtienen por vía directa cuando el pueblo los proclama o al añadirse un pueblo al Estado. Añadiéndole a esto, también estos nuevos hereditarios llamados principados son los pueblos o estados que ya están acostumbrados a vivir bajo la dirigencia de un príncipe, y en cambio, los nuevos; deben de digerir directamente el sistema de gobierno y reglas, que se les ha propuesto.

Este libro hecho por el autor Nicolás Maquiavelo, aparte de explicar la diferencia que tienen dichos estados, le adiciona varias puntos importantes a la hora de diferenciar entre cual de los estados es mucho más fácil de dominar y de conservar. En este caso los estados hereditarios, o sea, que se heredan de dicha época o por dicho rey, son mucho más fácil de controlar ya que debido a que se mantienen con la misma cultura, lengua, creencias y reglas, el príncipe solo debe de simplemente seguir los pasos de sus antepasados.

En cambio, los principados mixtos presentan mayores dificultades a la hora de establecer un control o mejor dicho, un sistema de gobierno nuevo, debido a las distintas características que se le imponen a las nuevas reglas establecidas por dicho gobernante.

Esto nos enseña y explica perfectamente que la manera más fácil a la hora de entrar al poder es simplemente lograr radicarse en las nuevas tierras y suprimir inmediatamente, tanto como gobernar directamente, antes de que se asome cualquier acción que conspire al poder o simplemente cualquier rebelión. Pero en caso de que el príncipe designe a esclavos que los sustituyan, o sea, que gobiernen por él, debe de dejarles claro al pueblo que al final del día el es la cabeza del poder, es decir que é les la mayor autoridad en dicho gobierno. El Príncipe explica que a su vez, las colonias son de mucha ayuda a la hora de mantener el orden y la vigilancia del nuevo estado adquirido.

Maquiavelo pone a los Romanos como ejemplo, porque los Romanos de todas las provincias que se adueñaros, las poblaron inmediatamente con colonias y no permitieron en lo absoluto que los reinos vecinos aumentaran su fuerza, y no dejaron que una potencia extranjera se les instalara cerca., porque ellos estaban claros que el que ayudara a otro a hacerse poderoso, provocaba su propia ruina.

Hablando en otros términos, para imponerse ante un gobierno que estaba acostumbrado a gobernarse por sí mismo, el príncipe debe arruinar su cultura e imponerse totalmente ante el pueblo. Eso si, que a la hora del gobernante querer adquirir la soberanía en el pueblo por medio de armas propias, se debe obrar como un verdadero gobernante y jefe y establecer claramente la nueva ordenanza. En cambio, al obtener la soberanía por medio del dinero o cualquier equis fortuna, es más difícil mantenerla, ya que la obtienen de una manera muy fácil y al luchar por ella se les hace difícil.

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