VIRUS Y ANTIVIRUS

VIRUS Y ANTIVIRUS

Un virus es un programa creado para trastornar el funcionamiento del equipo de cómputo. Es la secuencia de instrucciones y rutinas que tienen el objetivo de alterar el funcionamiento del sistema y corromper o destruir parte o totalidad de los datos almacenados en el disco.

Son varias las teorías sobre el origen de los virus, una de ellas explica que el primer virus computacional apareció en 1972, creado por Robert Thomas Morris, llamado Creeper, emitía un mensaje que decía “I’m a Creeper, catch me if you can”. Otra teoría cuenta que en el años de 1983, un estudiante de la universidad de California, Fred Cohen, fue el inventor del primer virus informático.

Los virus son muy pequeños, casi nunca incluyen el nombre del autor, ni el registro o copyright, ni la fecha de creación, toman el control o modifican otros programas, son dañinos, busca destruir o alterar, son auto-reproductivos; se reproducen a si mismos, son ocultos; utilizan varias técnicas para evitar que el usuario se dé cuenta de su presencia.

En ocasiones los antivirus pueden fallar en la detección, pero podemos detectar algunos síntomas como:

• Los programas comienzan a ocupar más espacio de los habitual

• Se reduce el espacio en la memoria RAM

• Aparecen o desaparecen archivos. Aparecen mensajes de error no comunes.

• Programas que funcionaban bien, fallan

• Mensajes u objetos extraños

• El disco trabaja más de lo necesario

• Los objetos de la apantalla, aparecen ligeramente distorsionados

• No se puede acceder al disco duro

Existen múltiples y diversos tipos de virus entre ellos se encuentran:

Macros/Código fuente: Una de las amenazas más importante para una red. Virus que más se están extendiendo a través de internet. Cuando se abre un documento, el virus se ejecuta, hace su daño y se copia en otros documentos.

Gusanos: se reproducen a si mismos, se arrastran por todo el sistema sin necesidad de un programa que los transporte. Se posesionan en una determinada dirección, luego se copian se copian en otro lugar y se borran del que ocupaban. Hace que queden barridos los programas o la información que encuentran a su paso por la memoria.

Mutantes: Al infectar realizan modificación al código para evitar ser detectados o eliminados.

Caballos de Troya: Se introducen bajo una apariencia diferente a la de su objetivo final, se presentan como información pérdida o basura. No se autoreproducen.

Camaleones: Actúan como programas comerciales en los que el usuario confía mientras está haciendo algún tipo de daño.

Bomba de tiempo: programas ocultos en la memoria del sistema o disco o en los archivos ejecutables com o exe en espera de una fecha u hora determinada para explotar.

Infector del área de carga inicial: Infectan diskettes o disco duro. Toman el control cuando se enciende la computadora y lo conservan todo el tiempo.

Auto repicables: Se autoreproducen e infectan los programas ejecutables que se encuentran en el disco

Infectores de programas ejectables: se esparcen fácilmente hacia cualquier programa.

Virus voraces: Alteran el contenido de los archivo de forma indiscriminada, generalmente sustituye el programa ejecutable. Son muy peligrosos, destruyen completamente los datos que puedan encontrar.

Virus lentos: Infecta solamente los archivos que el usuario hace ejecutar por sistema operativo, únicamente infecta el sector de arranque de un disquete.

Retro-virus o virus-antivirus: ataca directamente al programa antivirus incluido en la computadora.

Troyano: Captura toda la información que el usuario teclea, principalmente claves de acceso para de forma remota, acceder al sistema.

Entre los efectos de los virus se encuentran los no destructivos (aquellos que emiten mensajes en la pantalla, borran o cambian la pantalla) y los destructivos ( desaparición de archivos, formateo de discos duros).

Para detectar y prevenir un virus es necesario:

No abrir archivos adjuntos al correo electrónico de una fuente desconocida o sospechosa, no abrir ningún archivo del correo electrónico si no se sabe que es, borrar el correo no deseado sin abrirlo, no descargar archivos de personas desconocidas, actualizar el antivirus. Realizando copias de seguridad, hacer copiar de los programas originales, evitar utilizar copias de origen dudoso, colocar clave de acceso a la computadora, tener instalado un antivirus y actualizarlo periódicamente. Tener un disquete

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