400 Golpes

La película “400 Golpes” muestra la vida de Antoine, personaje principal. Antoine, se encuentra en el seno de una familia parisina que bien se puede denominar como desestructurada, debido a que los roles de los progenitores no están claramente definidos, o no cumplen con el rol que debe tener el progenitor. Se puede observar en la conducta despreocupada de estos (la madre al pasar poco tiempo en casa y no preocuparse por su hijo y el rol de amigo que desempeña el padre).

Su pertenencia a una familia con un nivel socioeconómico bajo, se puede decir que Antoine está dentro del perfil de individuo especialmente vulnerable, en riesgo de marginalidad.

De la conducta paternal destaca la ausencia de obligaciones y responsabilidades, así como la inexistente orientación y dirección que deberían proporcionarle a su hijo (disponibilidad para atender sus necesidades, establecimiento de normas y valores de referencia, propuestas de conducta mínimamente coherentes).

Esta falta de obligaciones y deberes de los padres deriva en consecuencias negativas para el niño, en este caso, el de Antoine, en comportamientos delictivos, conductas negativas y similares, que acaban arrastrando al adolescente a formar parte del ámbito penal (Centro de menores).

El entorno educativo, que en este caso no era el más adecuado, también favorece a la mala conducta de Antoine. Por ejemplo el profesor encasilla al protagonista como un chico “problemático” y a base de repetírselo hace que este llegue a serlo. Otra característica del ámbito escolar es que se caracteriza por poseer un modelo disciplinario jerárquico y autoritario:

o No existe una relación cercana entre los individuos.

o Tiempo disciplinario totalmente marcado.

o La distribución de los espacios está muy determinada. (El profesor en la tarima y los alumnos en sus pupitres colocados en filas.)

o Vigilancia jerárquica y observación permanente.

o Sanciones normalizadoras y exámenes continuos de los individuos.

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