Antecedentes de estudio
Enviado por Stefanya • 24 de Octubre de 2011 • Ensayo • 1.836 Palabras (8 Páginas) • 1.357 Visitas
ANTECEDENTES DE ESTUDIO
Cantona ubicado en el municipio de Tepeyahualco, Puebla; es un lugar lleno de encantos y belleza que sigue siendo un misterio para muchos. “CANTONA” a pesar de ser una ciudad que decayó en el año 1,000 sigue siendo una cuidad nueva. Nohemy Contreras en un reportaje hecho para el Sol de Puebla nos cuenta que Cantona fue abierta al público hace apenas unos años en 1994, y solo 13 hectáreas que es el 1% de todo lo que abarca Cantona ha sido descubierto; lo demás sigue en anonimato y no hay recursos para seguir las excavaciones.
Cantona tiene mucha historia como nos la cuenta Carmen Boullosa como lo narra en el documental Arqueología y Literatura que nos dice que para todo el que visita Cantona se queda sorprendido por toda la magia que alberga Cantona, y algo muy importante es que Cantona no tiene dioses. Esto es muy importante porque no construían templos para adorar a alguien, siendo que las civilización cercanas a Cantona si alababan a dioses. Con un ordenamiento cosmogónico, que es muy extraño, que es un total enigma. La cuidad está construida con una aceptación al desorden, es un laberinto, del que salen todos los caminos, para llegar a las casas como la estructura social que conforman. También en algunos patios se encuentran vestigios de cómo vivían sus habitantes, rastros de la vida domestica en Cantona que es el baño de temazcal, que era un baño de vapor, era un lugar de mucha intimidad para estas personas; que puede ser interpretado con diversos significados que son con fines terapéuticos, como rituales o porque no, también por ser un lugar de intimidad para el amor. Pero se encuentra también en un solo patio toda la vida de Cantona, de cómo era su civilización porque ellos comían afuera, mira el cielo, como una ciudad unida.
Cantona embriaga con su belleza, donde si se recorre con rapidez no se podrá admirar ni sentir a Cantona tal y como es, una cuidad fascinante, donde si uno se detiene a admirar cada aspecto de ella se excita la pupila de admiración donde uno se da cuenta de que Cantona a pesar de ser una ciudad de piedra no es tan solida y fría como sus muros aparentan, es acogedora y exquisita.
En Cantona como no ocurrió en ninguna otra civilización, tiene un sinfín de caminos, se podría describir como un laberinto que lleva a distintas partes de Cantona y esto quiere decir que era una cuidad bien organizada, que se dedicaba al comercio y fue habitada por distintas culturas como se puede comparar con la cantidad de personas de distintos lugares que hay en Estados Unidos, que es muy diversa su cultura.
Lo áspero que se ve Cantona por ser de piedra y con muros, es porque era una cuidad militar, pero también es una cuidad comercial que mercaba la obsidiana; como cuidad militar necesitaba defenderse, necesitaba cerrarse y como cuidad comercial necesitaba abrirse. Por eso la calzada estaba abierta por necesidades comerciales, pero cerrada también arbitrariamente con terrazas por necesidades de defensa. Era casi imposible entrar para un ejército enemigo.
La riqueza de Cantona radica en el cerro de Oyameles que es rico en la piedra que comercializaban, la Obsidiana. Tenían miradores, que soldados de Cantona vigilaban por estos para el impedimento de la entrada a Cantona, y ahí; por experiencia propia les puedo contar que se admira lo impenetrable que luce, como una muralla y solo entraban los que venían en plan amistoso, aunque en el año 1,000 no se sabe cómo, pero logro ser vencida por los enemigos y perdió todo su poder y su gloria.
Como dice Carmen Boullosa; SOY SOLO UN MONTON DE ESTIERCOL, que de este modo se decían así mismo los gobernantes prehispánicos a pesar del enorme poder que tenían, en este caso Cantona, que llego a tener 100 mil habitantes, era inmenso y su poder abarcaba hasta 4 mil km. a la redonda. Y a pesar de ser un pueblo poderoso, un pueblo militar y de controlar la obsidiana hasta Guatemala; nunca perdió el sentido del orden del mundo y de su lugar en la tierra, y mirando los nopales crecer y el bosque de pitas, construía y edificaban con una armonía no simétrica sus construcciones.
Todo Cantona esta voluntariamente asimétrico, todo fuera de orden, fuera de sus cabales; en sus construcciones tiene la reconstrucción de la complejidad de la vida y de la dificultad de encasillar no solo nuestros afectos como personas y como grupo social, sino el misterio de la vida y la muerte.
Cantona no solo alberga el mayor número de juegos de pelota de toda Mesoamérica, sino que también como dato curioso, aquí está el juego de pelota más pequeño que existe, aunque no se sabe exactamente que pasa ahí. Cantona magnificaba parte del cuerpo humano, la vida erótica, el pacer, la fertilidad; un gusto por la vida. Los muros de las paredes de los templos que están en la plaza ceremonial principal, nunca tuvieron estuco, ni color, ni revestimiento; descubrieron los habitantes de esta tierra que su belleza estaba en la piedra, en la piedra desnuda, que cambia de rojo a blanco, conforme se acerca al cielo. Las piedras de las construcciones de Cantona no tienen pegamento, no tienen argamasa, están puestas una al lado de la otra, solo aprovechaban o pulían la forma virgen de la piedra; de esta manera levantaron no solo muros pequeños sino muros altos de los templos y pirámides de esta ciudad, y sin pegamento en las piedras a sobrevivido esta cuidad todos estos años. Pero ¿Quiénes vivieron en esta ciudad? Sabemos que conocían cada rincón de los que es actualmente México, pero no sabemos mas, siguen siendo un misterio, una sorpresa.
El hombre de Cantona respetaba completamente la naturaleza, el bosque de pitas que lo rodeaba
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