Atrapados en cavernas de concreto: El movimiento rupestre

Atrapados en cavernas de concreto: El movimiento rupestre.

El movimiento rupestre, el cual sería considerado durante un tiempo el eslabón perdido dentro del rock mexicano, pues en la época solo solían prosperar los músicos que escribían sobre el amor y las diversiones de los jóvenes siempre y cuando no fueran tan liberales.

Pero los rupestres escribían canciones sobre los problemas sociales, acompañados de instrumentos viejos y sin hacer tanto espectáculo y faramalla.

Se considera que el movimiento nació en el Foro Cultural Tlalpan, fundado en 1980 ubicado en la colonia Belisario Domínguez de la entonces delegación Tlalpan. Este espacio albergaria tocadas de diversos artistas incluidos aquellos pertenecientes al movimiento.

Pero ¿Quiénes son los artistas pertenecientes al movimiento? Pues hay diversos nombres de quienes conformaron el movimiento. Partiendo de que actualmente Rodrigo Gonzáles “Rockdrigo” es la personalidad mas famosa del movimiento, podemos pasar a través de algunos nombres como Roberto Gonzáles, Armando Rosas, Fausto Arrellín, Eblen Macari, Roberto Ponce, Rafael Catana, Carlos Arellano y por supuesto destacar a Nina Galindo quien fuera la única mujer participante del movimiento.

Desafortunadamente el sismo de 1985 se llevaría, de entre muchas víctimas, a Rockdrigo, truncando su vida y su carrera. El único material auditivo grabado por “el profeta del nopal” fue Hurbanohistorias, en formato caset y grabado de manera independiente el cual, se cuenta, el mismo Rodrigo lo vendía personalmente terminando sus presentaciones. De este material se destacan canciones como Perro en el periférico, Distante Instante, estación del metro balderas y No tengo tiempo de cambiar mi vida entre otras.

Tocata, Fuga y Apañon de 1987 es uno de los discos mas representativos del movimiento, pues en 11 tracks nos trae la participación principalmente de Armando Rosas y los rupestres más representativos.

Desde aquel manifiesto rupestre pronunciado por Rockdrigo, el movimiento, que pasaría por el anonimato durante algunos años, pues solo los más conocedores conocían a detalle a este colectivo, a aquellos que sin grandes producciones, sin tanta faramalla ni changos cirqueros, pudieron llevar su poesía y su música a ser uno de los movimientos con mayor importancia en la historia de el rock mexicano.

 “No es que los rupestres se hayan escapado del antiguo Museo de Ciencias Naturales ni, mucho menos, del de Antropología; o que hayan llegado de los cerros escondidos en un camión lleno de gallinas y frijoles”

-Rodrigo Gonzales.

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