Benito Juarez
Enviado por lemego • 6 de Septiembre de 2012 • 1.566 Palabras (7 Páginas) • 347 Visitas
Benito Juárez García
Benito Juárez García, sin duda alguna uno de los personajes más sobresalientes del azaroso siglo XIX mexicano, es el primero de los próceres de nuestra historia que, de manera inusual, marca un hito en la movilidad social al escalar todos los niveles y estatus, ascendiendo de indígena zapoteca, sin el conocimiento siquiera del castellano, a presidente de la república, para asombro de todos los estudiosos de la sociología.
Hijo de Marcelino Juárez y Brígida García, indígenas zapotecas, nace en el caserío de San Pablo Guelatao, enclavado en la cadena montañosa conocida en ese entonces como la Sierra de Ixtlán (hoy Sierra de Juárez), al norte del estado de Oaxaca, el 21 de marzo de 1806, según se hace constar en su fe de bautizo, dado que en ésta se asienta: “En la Iglesia Parroquial de Santo Tomás Ixtlán, en 22 de marzo de 1806: yo, don Ambrosio Puche, Vicario de esta Doctrina, bauticé solemnemente a un niño que nació un día antes, a quien nombré Benito Pablo”. Huérfano a muy temprana edad queda bajo la tutela de su tío Bernardino, dedicándose a las labores del campo como peón y pastor de ovejas hasta que, en 1818, abandona su terruño y a pie, emprende el camino hacia la ciudad de Oaxaca en busca de su hermana Josefa, quien trabajaba de sirvienta en la casa del señor Antonio Maza, donde es aceptado como trabajador doméstico. Poco tiempo después es recibido como aprendiz de encuadernación en el taller del señor Francisco Antonio Salanueva, fraile lego de la Orden Terciaria Franciscana, quien lo acoge en su casa, lo enseña a leer y escribir el español, convirtiéndose desde ese momento en su protector y lo inscribe en el Seminario de la Santa Cruz.
Al declinar la carrera eclesiástica, ingresa en el Instituto de Ciencias y Artes de Oaxaca y obtiene la licenciatura en jurisprudencia a los 27 años; con el tiempo llega incluso a ser rector del mencionado instituto, donde además impartía clases aun siendo alumno. Recién egresado comienza a ejercer la abogacía y se aboca a la defensa de los indígenas en litigios de tierras. Dada su inteligencia y tenacidad asciende rápido en el desempeño de puestos en la administración municipal, es electo diputado local y desde ese escaño manifiesta su abierto apoyo a las reformas liberales propuestas por don Valentín Gómez Farías, lo que le ocasiona ser deportado del estado de Oaxaca, refugiándose temporalmente en el estado de Puebla. Al regresar a Oaxaca, años después es nombrado Juez de Primera Instancia y contrae matrimonio con Margarita Maza. En 1844 es designado Fiscal del Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca.
En 1847 se traslada a la ciudad de México en calidad de diputado federal y a fines del mismo año regresa a Oaxaca en calidad de Gobernador Interino, donde se dedica de lleno a impulsar la educación en su estado, duplicando durante su periodo el número de escuelas. Es de llamar la atención el hecho de que haya puesto al servicio de la ciudadanía un escritorio público, donde cualquier persona, sin importar su condición social, pudiera solicitar una entrevista con el gobernador. Al terminar su gestión regresa a impartir clases y retoma su profesión como abogado postulante.
Después de la intervención norteamericana, al regresar Santa Anna al poder, Juárez, al igual que otros connotados liberales, es desterrado del país. Sale a Cuba y después se establece en la ciudad de Nueva Orleáns un tiempo, estancia durante la que afianza su amistad con Melchor Ocampo, Ponciano Arriaga y otros. Viaja a Panamá para llegar al puerto de Acapulco e incorporarse a la Revolución de Ayutla, poniéndose a las órdenes del general Juan N. Álvarez. Al caer Santa Anna y ocupar Álvarez la presidencia de la República es nombrado Ministro de Justicia e Instrucción Pública, época en que se promulga la Ley sobre Administración de Justicia y Orgánica de los Tribunales de la Nación, del Distrito y Territorios (conocida como Ley Juárez), con la que fueron abolidos los fueros y privilegios que tenían los militares y el clero en general por encima de otras personas.
En enero de 1856 retorna a su natal Oaxaca como gobernador de la entidad y al jurarse el 5 de febrero de 1857 la nueva Constitución Política éste la promueve en todo el estado. Regresa a la ciudad de México al ser electo Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el 20 de noviembre de 1857, cargo del que solicita licencia el mismo uno de diciembre en que había tomado posesión del mismo, al ser nombrado por Ignacio Comonfort Secretario de Gobernación. El 17 de diciembre de 1857 se proclama el Plan de Tacubaya, por el que se desconoce la Constitución de
...